"Me encanta devorar y ser un tigre"

Pregunta. En su periódico, el Crónica, se liga mucho más que en EL PAIS. ¿Tendría algún consejo para darnos?Respuesta. Yo creo que se liga más porque es ficción. Seguro que aquí también se liga. Nosotros condensamos el ligoteo porque el público lo pide. Pero yo, Luis Sanz en Periodistas, en tres años he tenido dos novias. Tampoco es para tanto.

P. ¿Qué ha hecho pensar a los guionistas que los periodistas somos solidarios, buenos y benéficos?

R. Ahora estamos empezando a tener un poco más de mala leche y a sacar las miserias. Al principio de la serie no puedes comenzar con un personaje odiado. Pero yo tiendo a que bebamos, fumemos, nos emborrachemos, y a que robemos el artículo al compañero.

P. Ha sido modelo, empresario, restaurador, actor, y ahora ¿a comernos la merienda?

R. No, en absoluto. Esto es ficción, pero me ha apasionado este mundo del periodismo, que creo que tiene muchas connotaciones con la carrera del actor. Estamos exentos de monotonía, porque cada día es una nueva historia.

P. Pasó dos años en Medicina y cuatro en Derecho. ¿Quiere decir que no remata nunca?

R. Quiere decir que yo era un culo inquieto hasta que descubrí mi verdadera vocación, la de actor.

P. Su ideal de galán es Cary Grant. ¿Qué tenía él que usted no tenga?

R. Hombre, muchas cosas. Me gustaba todo de él salvo que era demasiado puesto, pero mi ideal de actor sería una fusión entre él y Robert de Niro, el uno por la galanura, el saber andar y el saber hacer, y el otro por la verdad y credibilidad de sus interpretaciones.

P. ¿Usted siempre se lleva a la chica?

R. Yo siempre lucho por llevarme a la chica o al gato al agua. Pero la chica me da muchas calabazas, como a todo el mundo.

P. Reconocerá que esa frase con la que dijo en una entrevista que empieza siempre, "Vamos a hablar muy clarito tú y yo", no es como para que nadie se desmaye.

R. ¿Dije eso? Lo que sí creo es que la verdad y el mirar a los ojos a la gente, sobre todo cuando llegas a una edad... Me parece que tirarte el rollo es de payasos o de niñatos. Me gustan las cosas claras.

P. También dijo que era hombre de pasiones controladas.

R. Yo soy un hombre de grandes pasiones. Lo que sí digo es que tengo un cerebro que creo que me funciona bien, y que sabe lo que pasa aun en el momento de la máxima explosión y el máximo ardor.

P. No me diga que es un tigre para el querer.

R. Me encanta devorar y me encanta ser un tigre, pero no pierdo los papeles ni la noción de lo que estoy haciendo.

P. Confiese su debilidad por el juego.

R. Me apasiona.

P. Pero no es de Ludópatas Anónimos.

R. En absoluto.

P. Ni le han echado de ningún casino.

R. No, no, no, no. Jamás. Mis riesgos son calculados

P. Sí es capaz de levantarse a las cinco de la mañana para echar un póker.

R. Eso sí, pero me gustan todo tipo de juegos. Me dices ahora que si nos jugamos el café a la raya a tirar monedas, y encantado. Me dices que nos juguemos 10.000 pelas y ya te digo que no. No me gusta jugar dinero, sino la competitividad, el reír. Mis juegos favoritos son el póker y el mus, porque el mus es un juego en el que estás vacilando continuamente.

P. En los nuevos capítulos de Periodistas, ¿arrasa con las redactoras o se mantiene sólo entre Laura y Ana?

R. Me quedo con ellas dos. He pedido un American Beauty con la becaria, pero me han dicho que no; el incesto con mi hija, tampoco me dejan. También les dije: pues una relación homosexual con Álex Angulo, que lo adoro, porque es lo mejor que hay, como persona y como actor . Y no me dejan. O sea, que en esta temporada seguiré bailando entre dos aguas.