Los peneuvistas mantienen su pacto con Euskal Herritarrok en Berriz

El PNV no escenificó ayer la previsible ruptura de su quinto pacto municipal con Euskal Herritarrok en el municipio vizcaíno de Berriz. Pese a que la plataforma abertzale se abstuvo en la votación de una moción que expresaba la "rotunda condena" del asesinato del concejal del PP en Durango, Jesús María Pedrosa, la alcaldesa Rosa María Ostogain (PNV) no quiso aclarar si esta postura suponía la invalidación del acuerdo con EH, como ha ocurrido en los otros casos. "Hoy no haremos declaraciones ni responderemos a ninguna pregunta", dijo la alcaldesa peneuvista tras votarse la moción y acabar el pleno municipal.Lo previsible es que hoy o en los próximos días, Ostogain firme los decretos de cese de dos ediles de EH como responsables de Cultura y Euskera. Pero ayer fue la primera vez, desde que hace mes y medio el PNV decidió la ruptura de sus acuerdos municipales con los abertzales, en que no se anunció la invalidación de un pacto tras constatarse la negativa de los concejales de EH a condenar la violencia. En los cuatro ayuntamientos donde la entente nacionalista se ha roto (Durango, Basauri, Arrigorriaga y Balmaseda), la decisión se conoció antes o después del pleno municipal.

En Berriz, una localidad de 4.000 habitantes a escasos ocho kilómetros de Durango, los 11 corporativos se vieron sorprendidos por la presencia de cámaras y medios de comunicación. El pleno, con sólo tres puntos, terminó con el debate de la moción presentada por un grupo independiente, apoyada por todos (PNV-EA y PSE) salvo la abstención de EH, que instó a "fortalecer el trabajo político" para acabar con el "enfrentamiento".

Si se confirma la ruptura en Berriz, los peneuvistas habrán cerrado la invalidación de sus pactos con EH en los municipios vizcaínos donde tienen alcalde.