Dos constructores compran la estación de esquí de Port del Compte

La estación de esquí de Port del Comte (Solsonès) ha sido adquirida por dos empresarios de la construcción, Jaume Majoral y Francesc Moliné, que están dispuestos a iniciar un plan de inversiones para modernizarla y llevarla hacia un camino de rentabilidad. Port del Comte, que empezó su actividad a principios de la década de los setenta, era propiedad de la familia Montañà, que en la presente década ha tenido serios problemas económicos con esta estación que han concluido con el embargo de parte de las instalaciones. En una de estas actuaciones por reclamación del Instituto Catalán de Finanzas, la familia perdió la propiedad del hotel, que aún está en manos de la Administración catalana.Majoral y Moliné, constructores del Solsonès y el Alt Urgell, respectivamente, han creado la sociedad Guimaru, SL, para adquirir la estación por un valor que, de momento, no ha trascendido. Los empresarios han anunciado su voluntad de invertir 1.000 millones de pesetas para modernizar las instalaciones, adquirir cañones para la fabricación de nieve artificial y construir un nuevo telesilla.

La falta de modernización ha llevado a la estación a un callejón sin salida: esta última temporada, en la que la mayoría de pistas han cerrado con excelentes resultados, ha quedado en blanco en Port del Comte, ya que, al carecer de cañones para fabricar nieve, su actividad estaba condicionada por las condiciones meteorológicas.

Los nuevos propietarios tienen previsto iniciar negociaciones con el Instituto Catalàn de Finanzas para estudiar la posibilidad de recuperar el hotel y solicitar ayuda a través de créditos blandos para recuperar la estación.