"El PP no es el partido de la Iglesia"
Pregunta. No es habitual que sea la Iglesia la que invoque su separación del Estado, y menos por conflictos con el PP, como ha hecho usted.Respuesta. La Iglesia católica ha sido siempre muy amante de su propia libertad y partidaria de la independencia del Evangelio.
P.- Su antecesor y el poder civil estaban a partir un piñón.
R.- No entro en ello. Lo que había era un consenso entre las instituciones de Ávila para crear una universidad católica cuyo marco jurídico habían de ser los acuerdos entre la Santa Sede y el Estado español. Probablemente esto hacía que apareciera ese consenso como un acuerdo cerrado.
P. Ahora no todo son parabienes entre su grey.
R. Ciertamente es así. Pero yo he querido ser respetuoso con el orden democrático, acatando el dictamen del Consejo de Estado, que decía que no puede haber fundación cultural alguna interpuesta entre la Universidad y su legítimo titular, el Obispado de Ávila.
Perfil
Adolfo González Montes, salmantino,de 53 años, que ha cumplido esta semana tres años como obispo, estudió en Tubinga y es doctor en Teología, licenciado en Filosofía, ecumenista y experto en Lutero. Se dice apasionado de la pintura y buen oyente de música clásica, aunque "no le hago ascos al pop, al 'blues' o al 'country". Le gusta andar, ver el atletismo y hacer fotos
P. Se opuso -y ello hizo mucho ruido- a la colocación de la bandera dentro de la catedral; o a que los visitantes pasen por dentro del Obispado para recorrer la muralla.
R. Yo no he querido más que defender la autonomía de la Iglesia. Nunca me he opuesto a la colocación de la bandera en lugar preferente, pero no al lado del altar.
P. No me diga que no es chocante lo de Ávila: que se enfrenten Iglesia y PP.
R. Pues así es. Pero yo no sé por qué el PP tiene que interpretarse como partido de la Iglesia. En el PP, como en el PSOE, hay concepciones de la ordenación de la sociedad que no son ni asimilables ni compaginables con el Evangelio.
P. Pero sabe que al PP le tiene contento.
R. Pues sí, mire. Han hecho alguna descalificación mía que realmente es inaceptable de todo punto. Hablo del PP de Ávila.
P. Que es el granero de votos populares mayor de España.
R. Sí.
P. ¿Le ha tocado bailar con la más fea?
R. Pues viendo otras situaciones, como el pulso entre el cabildo y el arzobispo de Zaragoza y la Diputación General de Aragón por el control de la Seo, tampoco. En todas partes cuecen habas. Ahora, es verdad que aquí en Ávila, como en otros lugares, hay sectores sociales con pautas de conducta que responden al caciquismo más tradicional.
P. ¿Le dan guerra las carmelitas?
R. Ninguna, sinceramente.
P. Entre las carmelitas de Ávila, sector pacífico, y las de Duruelo, las conservadoras de la madre Maravillas, ¿a cuáles pastorea más a gusto?
R. En Ávila hay varias fundaciones de la madre Maravillas. Las he visitado a todas y siempre he quedado profundamente impresionado por la reciedumbre de su espiritualidad, que no tiene que ver nada con situaciones sadomasoquistas. Estoy a gusto con todas y tengo que pastorearlas a todas.
P. ¿En qué ámbito se encuentran sus pecados màs inconfesables?
R. En vivir enajenado en tanta actividad. Ir y venir en tantas cosas que uno no sabe si va o si viene.
P. ¿Sigue incorrupto el brazo de Santa Teresa?
R. Sí. Está conservado en Alba de Tormes y expuesto a la veneración del pueblo. Cualquiera puede verlo.
P. Si José María Aznar lo pidiera para alguna necesidad, ¿podrían prestárselo?
R. No. Creo que eso hoy no se contempla. Creo que no lo pediría. No parece procedente que tesoros de la Iglesia estén custodiados por una familia particular. Son privilegios que han venido desapareciendo.
P. ¿Qué le pareció el tercer secreto de Fátima?
R. Es una visión retrospectiva de una experiencia de fe expresada de forma simbólica.
P. Las apariciones no son dogma de fe. ¿Usted se cree ésta?
R. En general la creemos la mayoría de los cristianos. La Virgen puede perfectamente hacerse visible.
P. ¿El alcalde de Ávila va a ir al infierno?
R. Eso no lo sé. Tendría que preguntárselo a San Pedro.
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