Zidane quiere jugar junto a Raúl

Zidane, el general de Francia, amaneció tras la victoria contra España decidido a solidarizarse con otra megaestrella, Raúl. El rutilante jugador francés apoyó al madridista, que a punto estuvo de ser su verdugo si hubiera acertado con el penalti en el tramo final del partido. "Lo siento por él, estas cosas pasan, pero sigue siendo un grande de verdad", dijo el soberano jugador marsellés. Zidane enfatizó que Raúl "es un gran jugador", y deslizó a continuación en italiano: "Es un jugador fortísimo, me gustaría jugar con él". El diez francés matizó que tiene contrato en vigor con el Juventus, aunque en un futuro le gustaría enrolarse en el fútbol español. Respecto al choque del pasado domingo, Zidane admitió la fortaleza de España, pero, en su opinión, "Francia fue más fuerte". También apuntó quiénes son sus jugadores favoritos del torneo, y citó explícitamente a los portugueses Figo y Rui Costa -rivales de Francia en la semifinal de mañana-, a los holandeses Davids -compañero suyo en el equipo turinés- y Kluivert, y al italiano Totti.El penalti fallado por Raúl se convirtió en el guión principal en la concentración francesa. "Dios estaba al lado de Francia", sentenció Dugarry. Por su parte, el meta Barthez aseguró que "Abelardo hizo trampas". Dio tres razones: "El balón ya había salido a córner, Abelardo pisó mi mano y la única forma de quitarme su pie de encima fue levantarla, momento que aprovechó para hacer trampas ante el árbitro Collina". "No sé si pude influir en el fallo de Raúl con mis movimientos antes de que lanzara, pero está claro que los grandes equipos tienen su propia dosis de suerte", agregó el guardameta del Manchester United, que pagó hace un mes al Mónaco algo más de 2.000 millones de pesetas por su fichaje.

Barthez subrayó que a su equipo ya le han pitado en contra tres penaltis en lo que va de Eurocopa, dos ante España y uno frente a la República Checa. Y expresó su opinión: "Es preocupante, pero en este torneo hay grandes delanteros capaces de provocar errores de los defensas". El portero francés no se mostró preocupado por el hecho de que Francia esté recibiendo más goles que en su glorioso Mundial de 1998, "porque también metemos muchos más". Los campeones del mundo han encajado cinco goles en cuatro partidos, pero han logrado nueve, cifra que tan sólo supera Holanda.

El madridista Anelka se refirió al partido en su página web, su ventana habitual con el mundo exterior. Bajo el título "Cuando el gallo pica al toro", el delantero afirma que "no hubo sorpresa" y, pese a la "combatividad" de España, Francia se hizo un hueco en las semifinales. Sobre Raúl -"al que saludé al entrar al campo"-, Anelka se limita a ponerse en su lugar: "Imagino su decepción". Sus halagos son para Patrick Vieira, ex compañero suyo en el Arsenal: "Me ha impresionado el partido que hizo, tuvo una magnitud superior y demostró que es una roca". El propio Vieira, que jugó por la lesión de Petit, dijo ayer que frente a España había realizado el mejor partido internacional de su carrera.

Los franceses están pletóricos. Insisten en que tienen mejor equipo que en 1998. Ni siquiera les inquieta que Portugal, en una decisión cuestionable de la UEFA, tenga un día más de descanso, ya que jugó su duelo de cuartos el sábado. "A un equipo ganador como el nuestro no le valen excusas, sólo le vale ganar", subrayó Barthez.

Si Francia gana el europeo igualará el registro alemán, la única selección en toda la historia capaz de ganar consecutivamente una Eurocopa y un campeonato de mundo. Con Beckenbauer al frente, Alemania lo logró en 1972 y 1974.