Aguas de Valencia ofrece a su competidora Egevasa la dirección general de la sociedad

Aguas de Valencia, SA, (AVSA) concesionaria del servicio de agua potable de la ciudad, le propuso ayer al gerente de la empresa pública de aguas de la Diputación de Valencia (Egevasa), Aurelio Hernández, la dirección general y el puesto de consejero delegado cuando éstas se fusionen. Esta oferta cuenta con el respaldo de la mayoría de accionistas y supone la salida de Álvaro Aguirre de la dirección general de AVSA. La fusión pondría fin a la batalla que sostienen las dos compañías por la concesión del negocio del agua en Valencia, pendiente de renovación, durante los próximos 50 años.

El presidente de Aguas de Valencia, Vicente Boluda, se reunió ayer con Vicente Montesinos, consejero del Banco de Valencia en la sociedad hídrica, y con Aurelio Hernández, consejero delegado y gerente de Egevasa, compañía pública de la Diputación con la que proyectan fusionarse y optar al contrato de agua potable de la ciudad de Valencia, valorado en 500.000 millones de pesetas. Se entrevistaron para discutir las condiciones de la operación, que en estos momentos analiza desde el punto de vista técnico sendos bancos de negocios.Además de los aspectos técnicos de la fusión, las dos compañías intentaron avanzar en cuestiones de futuro; entre ellas quién dirigirá la sociedad cuando el director general de AVSA abandone su cargo -el consejo mandató en su última reunión a Boluda para que cese a Aguirre, según fuentes próximas a la sociedad-. El ofrecimiento a Aurelio Hernández, alcalde del PP y hombre considerado en Presidencia de la Generalitat, disparó ayer todas las alarmas acerca de la continuidad de Aguirre. "A mí no me han dicho nada todavía. No te puedo decir más", respondió ayer el director general a preguntas de este periódico. Boluda fue más rotundo y negó, por otro lado, que hubiera despedido a Aguirre a pesar del mandato del consejo.

En esta remodelación, el Banco de Valencia (Grupo Bancaixa), propietaria del 6% de AVSA, intenta aumentar su participación e incluso catapultar a su consejero en Aguas, Vicente Montesinos, a la presidencia. La situación en AVSA volvería, después de dos años de tensiones accionariales, al punto de partida: el banco valenciano aumentaría su participación, tal y como pretendía la Administración valenciana, en una sociedad con grandes posibilidades de renovar la concesión del servicio de agua potable de Valencia que gestiona desde principios de siglo a instancias del Marqués de Campo. Pero con una diferencia notable respecto al estallido del conflicto en el verano de 1998: en el transcurso de esta guerra accionarial se han incorporado a la sociedad, directa o indirectamente, el propio Boluda, las constructoras Lubasa y Facsa, y personas del PP, entre ellos Aurelio Hernández o Salvador Palop.

El nombramiento del consejero delegado y gerente de Egevasa como consejero, siempre en caso de fusión, cuenta con la simpatía de la mayoría de los accionistas de Aguas. El ofrecimiento no ha pasado, sin embargo, por consejo. Sólo Boluda se mostraría reacio a la sustitución de Hernández por Aguirre debido a su debilidad para conservar la presidencia.

La junta general de accionistas convocada dentro de nueve días, el 29 de junio, podría arrojar algunas sorpresas. Tales como la remodelación del consejo, donde Boluda, que cuenta con cuatro consejeros, se quede con un sólo puesto, el suyo. La intención es ajustar el reparto de los consejos al peso accionarial de cada uno de los grupos. "No sabemos si habrá remodelación o habrá que esperar a después", destacó ayer otra fuente próxima a la sociedad.

La fusión o absorción de Vainmosa, copropietaria de Egevasa, por parte de Aguas de Valencia se llevaría a cabo con un canje de acciones entre las dos sociedades. Esta operación permitirá, por ejemplo, que Bancaixa, accionista de Vainmosa, eleve de partida su participación en la nueva compañía -esa es una de sus bazas ahora en la negociación con los grandes accionistas de Aguas de Valencia: Saur y el BSCH-. También obligará a abrir huecos en el consejo de la futura sociedad para los directivos de Egevasa, y es en este punto en el que Aurelio Hernández se convertiría en consejero delegado y, por tanto, en hombre fuerte de la sociedad fusionada.