Una jornada llena de lamentos

La mañana lluviosa dejó una tarde de cielo más claro, pero repleta de lamentos. Cualquier rincón del circuito servía para desahogarse. Nadie comprendía tanta mala suerte acumulada en los pilotos españoles, protagonistas de nueve de las 26 caídas de la jornada. De todos ellos, sólo sufrió lesiones José Luis Cardoso, con fractura de muñeca tras caerse en el warm-up matinal.Carlos Checa tardó en reaccionar. Tenía la ilusión de ser líder absoluto del Mundial en Catalunya. "He caído en el mismo sitio que todos", comentó. "Sin esperarlo, sin estar arriesgando. Simplemente no he podido hacer nada. Ha sido una pena porque tenía muchas esperanzas depositadas en esta carrera, aunque la moto no acababa de ir bien sobre mojado".

"Había empezado mal y preferí no arriesgar al principio", explicó Àlex Crivillé. "No quería precipitarme y no empecé a apretar hasta encontrarme cómodo. Entonces me ha derrapado la rueda trasera sin avisar y me he encontrado en el suelo. Ha sido un fin de semana para olvidar". No le consoló ni siquiera el haber salido ileso del aparatoso accidente.

La carrera de 250 también estuvo marcada por la lluvia persistente, pero las caídas no afectaron a casi ninguno de los notables de la categoría. Se impuso el francés Olivier Jacque (Yamaha), después de deshacerse primero de su compañero de equipo Shinya Nakano y después de otro japonés, Tohru Ukawa (Honda). Los tres estuvieron prácticamente toda la carrera juntos, rodando con relativa comodidad dadas las circunstancias, y el desenlace no llegó hasta las últimas vueltas.

Insólitos 125cc

Ninguno de los cinco primeros del Mundial de 125cc consiguió cruzar bajo la bandera a cuadros del Gran Premio de Cataluña. El líder, Mirko Giansanti (Honda), no llegó a tomar la salida porque el viernes se fracturó la muñeca derecha. Youichi Ui (Derbi), cuarto, se cayó en la segunda curva y arrastró a su compañero Pablo Nieto, que reemprendió la marcha en última posición y, tras remontar espectacularmente, acabó luchando por una plaza en el podio.

El actual campeón, Emilio Alzamora, tercero en el campeonato y principal esperanza de la afición en la cilindrada menor, comenzó con calma, sin obsesionarse por el arriesgado tirón inicial del italiano Lucio Cecchinello (Honda). Pero en la tercera vuelta, estando sexto y sin forzar el ritmo, la moto le lanzó por los aires en la curva parabólica de entrada a meta, maldita para Crivillé y Checa en el warm-up matinal, y que más tarde también descabalgó a Roberto Locatelli (Aprilia), segundo del Mundial. Fue el día de los poco habituales de las portadas y los podios, y el italiano Simone Sanna (Aprilia) aprovechó el caos para anotarse con holgura la primera victoria de su carrera en el Mundial.