La Comunidad echa abajo dos recalificaciones en Las Rozas por deficiencias urbanísticas.

La Comunidad de Madrid le ha dado un varapalo urbanístico al Ayuntamiento de Las Rozas (47.900 habitantes). La Consejería de Obras Públicas y Transportes ha rechazado una recalificación, propuesta por el Consistorio, para la construcción de 860 viviendas y ha aplazado la aprobación de otra a expensas de que se realicen las correcciones oportunas. La falta de equipamientos y la escasez de zonas verdes, en contraste con el incremento de la población, son dos de los motivos por los que las modificaciones puntuales han sido rechazadas.

La modificación puntual es una figura urbanística polémica. San Sebastián de los Reyes, por ejemplo, recalificó una gran finca para la construcción de 5.300 pisos por ese sistema, en lugar de revisar su Plan General de Ordenación Urbana, y los tribunales lo anularon por ilegal.Las Rozas ha hecho lo mismo sólo que a mayor escala: en los últimos tres años ha aprobado 10 modificaciones puntuales con las que ha recalificado otras tantas fincas para la construcción de 12.000 viviendas. Siete de ellas ya tienen el visto bueno definitivo. De las tres restantes, dos -las mencionadas- han sido rechazadas y queda otra por resolver. La aprobación definitiva de dos de esas 10 modificaciones puntuales ha sido denegada por la Comunidad. Así, la Consejería de Obras Públicas pone freno al urbanismo que impulsa el equipo de gobierno de Las Rozas.

Una de las dos modificaciones puntuales denegadas es la conocida como Punta Galea. Esta parcela estaba calificada como suelo terciario -para oficinas y empresas- en el plan general urbano vigente en la localidad, que elaboró el PSOE. No incluía la edificación de vivienda alguna.

El PP la recalificó para la construcción de 860 viviendas, pero la Comunidad ha denegado la aprobación definitiva. El informe de denegación establece: "Se considera injustificable la supresión del equipamiento previsto por el planeamiento vigente, máxime cuando la modificación conlleva un incremento de la población. El espacio libre que se propone no reúne los requisitos exigibles para servir a la población a la que se destina tanto por el alejamiento del propio ámbito objeto de esta propuesta de modificación como por su especial situación de marginación, por estar flanqueada en un entorno ferroviario", establece. Y añade: "En todo caso, la localización de este espacio libre resulta fundamentalmente inadecuada por el hecho de estar incluida dentro de una zona T (Área de transición) dentro del parque regional de la Cuenca Alta del Manzanares", constata.

Obras Públicas concluye informando "desfavorablemente" a la propuesta de aprobación de la recalificación. Un portavoz de Obras Públicas ha explicado que esta modificación puntual denegada no puede ser presentada de nuevo, ni rectificada. "El PP de Las Rozas tendrá que presentar un proyecto nuevo diferente y darle otro nombre para que la consejería lo analice y le dé, o no, el visto bueno, la aprobación definitiva", aclaró.

La segunda modificación puntual rechazada por la Comunidad es la denominada de la Carretera de El Escorial. El PP propuso recalificar tres parcelas que suman 41.700 metros cuadrados para la construcción de 492 viviendas en bloques, cuando el plan general vigente sólo autoriza edificar 86 viviendas unifamiliares.

La Comunidad aplaza la aprobación definitiva de esta recalificación hasta que el Consistorio la corrija. El proyecto de recalificación tiene varios defectos. Por un lado, mete en el mismo saco las zonas verdes con las calles y aparcamientos, a lo que la Comunidad le contesta: "Los espacios libres... no podrán entenderse como compatibles con el uso de viario y aparcamiento, al tratarse de parcelas inferiores a 20.000 metros", establece el informe.

El alcalde de Las Rozas, Bonifacio de Santiago, del PP, admite que "hay cosas que no cuadran" en las modificaciones puntuales rechazadas. Pero sigue empeñado en sacarlas adelante: "Nos sentaremos con representantes de la Comunidad para ver qué está mal, corregiremos los errores y ya está, las presentaremos otra vez y punto", afirma. "Si los técnicos de la Comunidad nos dicen que hay que meter las dos recalificaciones en la revisión del Plan General lo hacemos y punto", afirma.

La oposición opina: "La denegación de las dos modificaciones puntuales por la Comunidad viene a darnos la razón en nuestra denuncia política contra los planes urbanísticos del equipo de gobierno municipal", según Ramón Moreda, del PSOE. Y agrega: "El urbanismo que propulsa el PP roceño es desmedido y voraz".