"Mis personajes tienen una vida sexual envidiable"

Periodista y escritora, a la valenciana Carmen Amoraga (Picanya, 1969) le interesa especialmente el erotismo en la literatura. Una atmósfera de sensualidad que ya estaba presente en su primera novela, Para que nada se pierda, con la que obtuvo el II Premio Ateneo Joven, y que vuelve a aparecer en su segundo título, Todas las caricias (Algaida), que es, según sus palabras, la historia de una obsesión: la pasión amorosa.Pregunta. ¿Qué narra Todas las caricias?

Respuesta. Es la historia de una obsesión, la crónica sentimental de la protagonista, una mujer que vive obsesionada por un hombre. Las obsesiones amorosas son muy frecuentes, forman parte de la vida cotidiana de muchas personas. La vida está llena de cosas que nos obsesionan, pero es la obsesión amorosa la que más sensación de fracaso provoca.

P. ¿Qué hay de diferente entre ésta y su primera novela?

R. La primera contaba las vidas infelices de unos personajes que buscaban la felicidad. En Todas las caricias, la protagonista tiene todos los números para ser feliz y no lo sabe ver, está abocada a la infidelidad.

P. ¿Por qué ese interés por el erotismo en sus novelas?

R. No concibo una historia de amor si no hay sexo, por eso todos los personajes están tan relacionados con el erotismo. Es una forma de contar su vida sexual. No me creo una historia de amor sin sexualidad, que no se debe dejar aparte en la vida, igual que el erotismo en la literatura. En mi primera novela, los personajes lo vivían en la fantasía porque no podían hacer realidad sus deseos. No concibo una novela mía sin sexo, porque los sentimientos es el tema que más me interesa, y mis personajes viven esos sentimientos con plenitud. Tienen una vida sexual envidiable.

P. ¿Por qué empezó a escribir?

R. Ahora soy más lectora que antes. La literatura es una vía para vivir otras vidas y sobre todo para sentir. Me gusta leer para sentir y me gustaría que con lo que escribo otros puedan sentir.

P. ¿Prepara otra novela?

R. Sí. Será una historia sobre las películas porno en la Barcelona de los años 20 en la que los sentimientos no tienen tanta importancia. Habrá más documentación.

P. ¿Periodismo o literatura?

R. Si hay que elegir, la segunda, pero creo que hay periodistas que son magníficos escritores; otros tienen mucho cuento. La verdad es que conozco a muy pocos periodistas que no fantaseen con la idea de escribir una novela.

P. Usted ha dicho que cuando tenga 50 años, espera tener 15 novelas. ¿Lo da por hecho?

R. Es algo que me gustaría. Es complicado. No quiero vivir obsesionada con eso, pero sólo hay una manera de conseguir los sueños, que es tenerlos.