El PSOE andaluz quiere liderar un acuerdo sobre el diseño de las reglas de juego del congreso federal

El PSOE de Andalucía intentará alcanzar un "acuerdo de mínimos" en cuanto al procedimiento y reglas de juego del congreso federal del próximo mes de julio. Según explicó ayer el secretario de Organización, Luis Pizarro, a la federación andaluza -la más numerosa, con el 29% de los delegados-, le corresponde un papel "importante de responsabilidad" para consensuar un modelo sobre el funcionamiento del congreso, las enmiendas y el sistema de elección. El congreso regional se celebrará en la primera semana de diciembre para que no se vea contaminado por el federal.

La ejecutiva andaluza, presidida por Manuel Chaves, analizó ayer el proceso congresual y expresó su deseo de propiciar un "denominador común" que aglutine la posición mayoritaria de sus 287 delgados, que suponen casi el 29% de los 997 que acudirán al cónclave. En conferencia de prensa, Luis Pizarro, también miembro de la comisión política federal, dijo que ese "acuerdo de mínimos" afectaría a cuestiones de procedimiento en el desarrollo del congreso, "con generosidad y solidaridad, sin prepotencia, pero sabiendo que somos la federación más numerosa".A su juicio, "hay margen suficiente" para que en Andalucía se alcance una posición mayoritaria en relación con las enmiendas a la ponencia sobre el modelo de partido, el sistema de elección del candidato a la secretaría general -si, finalmente, hay más de dos-, o la conveniencia de un proceso de elecciones primarias. "Estamos intentando por todos los medios que se vaya formando una opinión para conseguir una dirección cohesionada", apostilló.

Según Pizarro, también a la comisión política le preocupa que el aspirante que obtenga mayor respaldo no disponga de un apoyo sólido, por lo que está estudiando posibles fórmulas para garantizar la estabilidad.

El secretario de Organización afirmó que, al igual que la comisión política, la dirección del PSOE andaluz tiene como principal objetivo preparar un "buen" congreso, con "una exquisita neutralidad e imparcialidad". Pizarro dejó claro que desde la ejecutiva andaluza no se producirá ningún tipo de pronunciamiento previo en apoyo de un candidato y subrayó que los delegados votan de manera individual y secreta.

Confrontar proyectos

En cuanto a las demandas de las candidatas a la secretaría general, Rosa Díez y Matilde Fernández, para que el resto de aspirantes enseñen sus cartas - en referencia a que presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, no haya anunciado aún su candidatura-, Pizarro dijo que "lo ideal" sería que se pudieran confrontar todos los proyectos, aunque matizó: "Cada uno es dueño de su tiempo".

La ejecutiva acordó ayer celebrar el congreso regional el 1, 2 y 3 de diciembre, y completar los provinciales justo antes de las Navidades. De esta forma, los socialistas andaluces agotarán el plazo para su asamblea, que debe ser en el transcurso de este año, para evitar que pueda verse contaminada y mediatizada por el polémico debate del federal. A finales de este mes, la dirección elaborará un borrador del calendario, que deberá ser aprobado por el comité director, máximo órgano entre congresos. Pizarro anunció que a partir de enero de 2001 se empezarán a preparar las elecciones municipales de 2003 "para espantar las pocas gaviotas que quedan" en Andalucía [en alusión a las alcaldías de capitales que tiene el PP] y consolidar los ayuntamientos socialistas.

Por último, la ejecutiva conoció, de boca de su secretario general y presidente de la Junta, Manuel Chaves, la nueva etapa de diálogo con el Gobierno central, y acordó que desde el PSOE no se pondrá "ningún obstáculo" para seguir en esta línea.