Los guerristas proponen que los líderes de UGT y CCOO entren en la futura ejecutiva socialista

Los guerristas propusieron ayer que los secretarios generales de los sindicatos UGT y Comisiones Obreras formen parte de la próxima ejecutiva federal del PSOE. Esa iniciativa fue expuesta en la presentación de Matilde Fernández en Sevilla como candidata a la secretaría general del PSOE. La ex ministra aseguró que si encabeza la futura ejecutiva federal dejará "dos sillas vacías" para que las ocupen los líderes sindicales. Tanto Fernández como Alfonso Guerra, al que identificó como su "padrino", afirmaron que la ponencia elaborada por la Comisión Política "no es la de la mayoría del partido".

Alrededor de 200 personas acudieron a la presentación de la candidatura de Matilde Fernández, en un acto que abrió la secretaria provincial del PSOE de Sevilla, Carmen Hermosín. Bajo una pancarta con el lema El proyecto socialista y con la antigua sintonía de las campañas electorales socialistas, Guerra dio su "apoyo personal" a Fernández, a la que describió como "una socialista sin más, sin adjetivos".Ambos subrayaron que los únicos que han presentado una ponencia alternativa a la redactada por la Comisión Política del PSOE son los miembros de su sector, mientras que el resto de los grupos y candidatos se han limitado a elaborar "manifiestos".

Guerra, que no quiso robarle protagonismo a la aspirante a la secretaría general, se limitó a pedir a los militantes que lean y comparen ambos documentos políticos para comprobar que el elaborado por Matilde Fernández y Francisco Fernández Marugán "es muchísimo mejor". "No hay color", enfatizó. A su juicio, la ponencia oficial "no recoge bien la sintonía de la mayoría del partido".

En opinión de Matilde Fernández, la ponencia marco, sometida ahora a debate en las agrupaciones para la presentación de enmiendas, es "mala", contiene "errores tremendos", "se limita a describir realidades" y no responde a las necesidades del Partido Socialista. "Si sale adelante, no dura ni cinco minutos", pronosticó Matilde Fernández, quien discrepó de la descripción que hace del PSOE la ponencia marco, que lo describe como un partido que gobierna para todos, "cuando eso no es cierto, sino que gobierna para las clases medias y las más desfavorecidas".

La ponencia del sector guerrista se nutre principalmente de los documentos elaborados en su día para el Programa 2000, un esfuerzo de debate teórico que se hizo para renovar el proyecto con que los socialistas ganaron las elecciones en 1982 y que en opinión de Matilde Fernández se dejó que lo sacaran adelante "otros", en alusión a los renovadores, que "lo guardaron en un cajón".

La ex ministra subrayó especialmente los aspectos ideológicos de su propuesta, por encima de los puramente orgánicos y de modelo de partido, y apostó por los "mestizajes" y las "alianzas" con las sindicatos y movimientos sociales para fortalecer la mayoría de progreso. En este contexto hizo su propuesta de que, si gana en el 35º Congreso Federal, además de los responsables de áreas habrá en la ejecutiva "dos sillas más", para los secretarios generales de UGT y Comisiones Obreras. Y "siempre tendrán la invitación", dijo, para que "cuando quieran" discutir tengan "su sitio" en la dirección del PSOE. Fuentes del PSOE andaluz calificaron de "antigualla" la propuesta. El líder de UGT dejó de asistir a la ejecutiva socialista, en la que tenía voz pero no voto, en 1988, a raíz de las fuertes diferencias con la política económica del entonces Gobierno socialista que culminó con una huelga general.

Matilde Fernández aludió ayer al ingreso en el PSOE de sindicalistas de CCOO identificados con Santiago Carrillo, ex secretario general del PCE, para argumentar su invitación al líder de Comisiones Obreras. Miembros del PSOE que dicen pertenecer al sector guerrista en Andalucía proceden, precisamente, de ese grupo. Fernández pidió ayer que la delegación andaluza escogida para el congreso vaya "todo lo cohesionada" que quiera, tal y como está pidiendo Manuel Chaves, pero que sea "plural".