ERC e IC-V dan por superadas las rencillas y abren una nueva etapa de colaboración
Esquerra Republicana (ERC) e Iniciativa per Catalunya-Verds (IC-V) dieron ayer por concluida definitivamente la etapa de continuas rencillas que ha caracterizado la relación entre los dos partidos minoritarios de la izquierda catalana en los últimos años. El secretario general de Esquerra, Josep Lluís Carod, y el presidente de Iniciativa, Rafael Ribó, se comprometieron a tener a partir de ahora una "relación fluida" y a abrir espacios de colaboración parlamentaria, especialmente a través de medidas conjuntas que "signifiquen profundizar en el autogobierno".
Los líderes de ERC y de IC-V se reunieron ayer en un hotel de Barcelona y se comprometieron a borrar los esquemas que ambas formaciones han utilizado en los últimos años para referirse al otro: desde ayer, ni Esquerra es un satélite convergente, como reiteradamente aseguraban los líderes de IC-V, ni la formación ecosocialista es un mero apéndice del Partit dels Socialistes como rezaba una de las máximas preferidas de la cúpula republicana.El último ciclo electoral y sus preparativos llevó las relaciones entre ambos partidos a uno de los puntos más bajos de su historia. Las pésimas relaciones se expresaron en múltiples ocasiones, algunas de las cuales fueron muy significativas: en las elecciones municipales, Iniciativa llegó a registrar las siglas ERC-Verds para dificultar la coalición que los independentistas ultimaban con Els Verds. Y en las últimas generales, cuando la izquierda negociaba la candidatura unitaria al Senado, los independentistas se negaron a tener encuentros bilaterales con IC-V al considerar que ya estaban representados por el PSC.
Una vez finalizado el ciclo electoral, ninguno de los dos partidos ha visto colmadas sus aspiraciones: ni ERC se vio engullida por la bipolarización en las autonómicas con motivo de su equidistancia, ni Iniciativa per Catalunya ha desaparecido de las instituciones. Tras constatar esta realidad, Carod y Ribó se comprometieron ayer a abrir una nueva etapa de colaboración. "A partir de ahora tendremos una relación fluida, lejos de las trifulcas legítimas del ciclo electoral", declaró Ribó tras la entrevista.
Ambos comparecieron juntos y sonrientes ante la prensa y acordaron colaborar prioritariamente en el campo de la mejora del autogobierno. No obstante, Carod subrayó que ERC e IC-V tendrán "otros espacios de colaboración". "El voto en el Parlament demuestra la proximidad en muchos otros asuntos", añadió.
Ribó denunció que en la Cámara se ha instalado la "atonía" para impulsar aspectos relacionados con la lengua, la cultura y la "personalidad propia del país". "Sería una escapatoria fácil echar las culpas al PP, pero hay que emplazar a todos los grupos para encontrar un revulsivo", aseguró.
Por otra parte, Carod advirtió de que Pasqual Maragall perderá fuerza como alternativa a Jordi Pujol si asume, como está previsto, la presidencia del Partit dels Socialistes (PSC). En opinión de Carod, Maragall "tendrá más dificultades" para articular un proyecto "homogéneo" desde la presidencia del partido. "Hubo mucha gente que lo votó precisamente porque se le veía al margen del PSC", remachó.
Ribó dijo suscribir las palabras de Carod y añadió que actualmente "es más necesario que nunca ofrecer una alternativa". El dirigente ecosocialista subrayó que esta alternativa no puede construirse sólo a partir de un partido político y ni siquiera a través de la suma de partidos. Según Ribó, es necesario implicar a las decenas de entidades sociales que operan en Cataluña.
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