ETA insta a los partidos nacionalistas a llegar a un acuerdo de mínimos

ETA volvió a terciar ayer, a través de una entrevista publicada en el periódico Euskaldunon Egunkaria, en las relaciones entre los partidos nacionalistas para respaldar la oferta de HB al PNV y EA e instarles a que lleguen a un acuerdo -un "mínimo común denominador" entre nacionalistas- que concrete los términos generales apuntados en Lizarra y marque el comienzo de una transición hacia un nuevo marco político para el País Vasco. En los últimos diez días, ETA ha hecho públicos, a través del diario Gara, los pactos previos a Lizarra a modo de recordatorio del punto de partida de la negociación; ha asesinado al fundador del Foro Ermua, José Luis López de Lacalle, para poner a prueba el "blindaje" del nuevo proceso respecto a la violencia y, finalmente, ha expuesto su posición en una larga entrevista, de ocho páginas.

Los dos encapuchados que aparecen en las fotografías del diario explican que, una vez decidida la ruptura de tregua, ETA no practica "la lucha armada contra el PNV y EA sino contra los enemigos de Euskal Herria", a los que identifican como España y Francia. Y añaden que "la lucha armada puede ser considerada un impedimento o una excusa para encauzar las relaciones con ETA, pero no para el trabajo en común con los abertzales básicos". Este planteamiento, por el que exigen a las formaciones nacionalistas que "blinden" ante sus atentados el proceso negociador recién iniciado, tuvo su precedente en la negociación de 1998 previa a la tregua, y ahora lo han sometido a prueba con el asesinato el 7 de mayo de López de Lacalle, de quien, por cierto, no hacen ninguna mención. ETA afirma también que PNV y EA tienen en sus manos las condiciones para que se termine la lucha armada.

Según el líder de EH, Arnaldo Otegi, la banda terrorista, a través de la entrevista concedida a Egunkaria, "coloca encima de la mesa una oportunidad histórica para superar el conflicto armado" e incluso ofrece a PNV y EA la posibilidad de "poner fecha de caducidad" a la actividad terrorista. En opinión de Otegi, "ETA deja claro que no da el proceso político por cerrado" y además "pone las claves" de su resolución.