PSOE y PP polemizan sobre la oferta de Aznar a Múgica

Ni el PP ni el PSOE encuentran obstáculo teórico alguno a la propuesta, que hoy estudiarán formalmente los grupos parlamentarios de ambas formaciones, para que el socialista vasco Enrique Múgica sea el próximo Defensor del Pueblo. Sin embargo, y pese a que el propio José María Aznar hizo esa oferta personalmente -primero al propio Múgica, hace más de 10 días, y después telefónicamente al presidente de la Comisión Política del PSOE, Manuel Chaves-, los dos partidos siguen enredados en una surrealista polémica.Desde el PSOE, según Chaves, se teme que el PP persiga con este nombramiento reforzar su imagen de partido centrista y, al mismo tiempo, armarse de algún tipo de "maniobra" envenenada para rehuir luego la negociación de otros puestos de extracción parlamentaria. El secretario general del PP, Javier Arenas, respondió ayer que los reparos de Chaves, expuestos el lunes en la reunión del Comité Federal socialista, son "un error" y "una extraordinaria torpeza". El ministro portavoz, Pío Cabanillas, dio un paso más en la réplica de La Moncloa a Chaves: "Eso dice muy poco de quien lo dice. Múgica es una verdadera joya para cualquier Gobierno o estructura democrática".

El posible nombramiento de Múgica para Defensor del Pueblo ha llegado a complicarse aparentemente de tal forma que hasta desde las filas del PP han llegado a preguntarle a Aznar si realmente había conversado sobre este asunto, como tenía previsto, con Manuel Chaves.

Aznar habló primero, efectivamente, con el propio Múgica, y luego con Chaves, y dejó la ratificación del pacto en manos de los portavoces parlamentarios de ambas formaciones.

El PSOE querría abrir ese tipo de negociación a otros puestos de extracción parlamentaria (consejeros de RTVE, de la Junta Electoral Central, del Tribunal de Cuentas, miembros del Consejo General del Poder Judicial, del Consejo de Seguridad Nuclear y del Consejo de Universidades). Pero el PP querría dejar zanjado ya el nombramiento del Defensor del Pueblo y "no entorpecer" ni "condicionar" un "asunto ya cerrado" con los demás.