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La baja tasa de paro de Castellón atrae a una extensa colonia

María Fabra

En Castellón, la colonia de rumanos está integrada aproximadamente por unas 7.000 personas, según datos no oficiales, que han llegado en su mayoría durante el último año. De éstas, algo más de 200 constituyen la Asociación de Rumanos en Castellón, que cuenta con la colaboración de Cáritas, CC OO y la Cruz Roja. Según el presidente del colectivo, Alfonso Pérez, la mayoría de los rumanos llegan a la Unión Europea con un visado de turista de, como máximo, 15 días, que "tienen que comprar por unas 300.000 pesetas". Castellón se encuentra entre las provincias con mayor recepción de inmigrantes rumanos debido a las noticias sobre la baja tasa de paro que registra (4,8%). Médicos, ingenieros y abogados, tanto hombres como mujeres, esperan los papeles que regulen su estancia. Mientras, según Pérez, trabajan en el cuidado de ancianos o niños, en el servicio doméstico o en el sector agrícola. En cualquier caso, los principales sectores económicos castellonenses esperan, casi con anhelo, que los trámites de legalización se agilicen debido a la necesidad de mano de obra.Así, por ejemplo, el sector de la construcción requiere, de forma casi urgente, cerca de 1.000 trabajadores. El presidente del colectivo, Vicente Monsonís, explica: "Tenemos noticias de que entre los rumanos han llegado muchos carpinteros, fontaneros y trabajadores del mármol".

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Por otro lado, la falta de mano de obra en la industria cerámica está generando un freno en su expansión. Mientras, los empresarios comprueban cómo los inmigrantes rumanos llegan a Castellón con un nivel de formación que facilita su integración en el mundo laboral y que en cualquier caso están dispuestos a reforzar desde las propias empresas.

Falta mano de obra

La agricultura es otro de los sectores que precisan de mano de obra (alrededor de 150 trabajadores en este momento), y en los inmigrantes no encuentran problemas para desplazarse de un campo a otro.

La hostelería, por su parte, juega con el tiempo en contra, dada la proximidad del periodo estival. De hecho, el presidente del colectivo de empresarios hosteleros de Castellón, Carlos Escorihuela, se reunió la pasada semana con el delegado del Gobierno en Valencia con el fin de ver la manera de agilizar los trámites para que los establecimientos puedan contratar inmigrantes.

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Desde el pasado 21 de marzo, y hasta el día 12 de mayo, en la provincia de Castellón se han recibido 1.852 solicitudes de regulación, de las que se han resuelto de forma positiva 264. La mayoría de ellas son de magrebíes, rumanos y argelinos.

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