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Núñez comunicará mañana a la junta su dimisión y convocará elecciones

Josep Lluís Núñez ha adelantado a mañana la reunión de la directiva del Barça, prevista para el 6 de junio, con la intención de presentar su dimisión, convocar la próxima asamblea de compromisarios y acelerar el proceso de convocatoria de elecciones, temas del orden del día de una junta convocada con carácter extraordinario. La oposición a Núñez coincide en la necesidad de que los socios acudan a las urnas antes de fin de año, previo pacto del proceso electoral. La directiva azulgrana, mientras, no renuncia a convencer a Núñez para que se decida y cumpla su mandato, que expira en 2002.

Canal Barça anunció anoche que Núñez dimitirá y convocará las elecciones con la máxima celeridad que establecen los estatutos, o sea, dentro de 37 días a partir de su marcha. Pese a que Núñez está decidido a irse, ciertos sectores del barcelonismo entienden que el comportamiento del presidente es tan desconcertante que no hay que descartar ninguna posibilidad porque todavía no ha hecho ninguna declaración institucional. Personas próximas al presidente, en cualquier caso, insisten en que su intención es abandonar el cargo y acelerar el proceso electoral con el cese generalizado de la directiva. Todos los miembros de la junta recibieron ayer una notificación en la que se les informaba de los dos únicos puntos del orden del día de la junta extraordinaria: la convocatoria de una asamblea de compromisarios y la de las elecciones. Los directivos se debatían ayer entre dos posibles alternativas: la primera, que Núñez les pidiera a todos la dimisión o bien que les permita agotar el mandato, que expira dentro de dos años. Sin embargo, tras el anuncio de Canal Barça, toma fuerza la primera de las posibilidades. En este supuesto, se debería crear una comisión gestora que dirigiría el presidente de la comisión económica, el catedrático de Economía Jaume Gil Aluja.

Núñez, sin embargo, se acogerá posiblemente a una tercera vía. Los estatutos del club le permiten, dado que se no se presentará a la reelección, mantenerse como presidente en funciones hasta el día de los comicios. De esa forma, con los 37 días del periodo electoral, tendrá tiempo para poder auditar las cuentas del club y planificar la próxima temporada deportiva del 2000-2001. En cualquier caso, Núñez ha generado una confusión enorme hasta el punto que ha sorprendido a su propios directivos, los mismos que pusieron sus cargos a disposición del presidente en un gesto de fidelidad sin precedentes hace unos meses. Núñez les pedirá en la junta que si quieren concurrir a las elecciones que, por dignidad, se marchen.

Joan Gaspart, vicepresidente del club, que se ha perfilado como candidato continuista, estará mañana en esa tesitura. "No sé todavía si me presentaré", dijo anoche tras reunirse varias horas con Núñez en su despacho profesional. "Él está muy decidido. Tengo una opinión muy distinta a la suya. Creo que debe acabar su mandato pero respeto su opinión, aunque veremos lo que sucede en la reunión de mañana", afirmó.Gaspart se había mostrado partidario de que las elecciones se celebraran en la primavera del próximo año para ganar tiempo y competir con garantías con la oposición.

La oposición, mientras tanto, ha mostrado su preocupación por la fecha de las elecciones, y sobre todo por la manera como se administrará el club a la espera de nuevo presidente, y por el nombre del futuro entrenador y la lista de altas y bajas. Elefant Blau, a través de su portavoz Joan Laporta, ha anunciado que presentará una candidatura a una elecciones que, a su entender, deben celebrarse en septiembre, "mes al que hay que llegar con una gestora" en la que estuvieran representados todos los sectores barcelonistas; Joan Castells, precandidato de Associació pel Futur Blaugrana, entiende que el socio debe elegir presidente cuanto antes mejor, en julio, o sino a partir de septiembre; y Carles Tusquets, líder de Força Blaugrana, grupo que también acudirá a las elecciones, parece más partidario de que los comicios tengan lugar a partir de octubre.

Los grupos de oposición coinciden, en cualquier caso, en solicitar transparencia en el cambio y en la necesidad de llegar a acuerdos para planificar la próxima temporada a nivel deportivo. "No es conveniente que perdamos activos", puntualizó Laporta, cuando se le preguntó por la posibilidad de traspasar a Rivaldo, jugador con el que Núñez tiene previsto reunirse en los próximos días para que decida si quiere cumplir su contrato -expira en el año 2003- o prefiere aceptar una de las ofertas que tiene, entre ellas una del Lazio. Laporta, Castells y Tusquets han reiterado, al mismo tiempo, la posibilidad de articular una candidatura de consenso que podría llegar a evitar incluso una contienda electoral.

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