Aíto: "Ellos están un escalón por encima de nosotros"

El rostro alicaído de Efthimios Rentzias lo decía todo. El jugador griego del Barça no podía ocultar la tremenda decepción que suponía caer, una vez más, en una fase final y, por si eso fuese poco, hacerlo en su país. "Lo intentamos todo, pero no pudimos", acertó a decir con gesto muy compungido. Pocas explicaciones podía encontrar a una derrota contundente, el colofón de un partido en el que el equipo azulgrana nunca pareció tener opción.Así que Rentzias se remitió a las palabras del técnico del Barça, Aíto García Reneses para justificar la decepción. "El Maccabi ha sido justo ganador y hay que felicitarlo. Nosotros hemos hecho lo que hemos podido, pero ellos están un escalón por encima", admitió Aíto. El técnico del Barça, serio y comedido como siempre, apenas dejó espacio para los sentimientos, quizá porque su experiencia ya es larga en este tipo de situaciones. "Tengo que felicitar a mis jugadores porque han dado todo lo que tenían", apuntó. "Creo que no sólo hay que valorar las victorias, sino también la entrega y la dignidad con la que hemos caído".Según el técnico azulgrana, poca resistencia podía oponer su equipo frente a un Maccabi al que calificó de superior en todos los aspectos. "Tienen mejores fundamentos; sus jugadores dominan todos los aspectos del juego, tanto en defensa como en ataque, y los nuestros no", admitió. La derrota, por lo que se desprendía de sus palabras, era casi inevitable. "Para mí, no ha sido una sorpresa. Tendríamos que haber estado muy acertados para tener opciones y no ha sido así".

Paseo griego

El Panathinaikos de Zeljko Obradovic pasó, según se esperaba, como un rodillo sobre las ilusiones del debutante Efes Pilsen. El 81-71 fue incluso corto para los griegos, grandes favoritos en la final de mañana.

El Panathinaikos sacó un punto de ventaja por minuto en el cuarto inicial de un periodo dominado por otros dos yugoslavos, Dejan Bodiroga y Zeljko Rebraca (26-16). Cuando los triples hicieron aparición sobre la pista, el cóctel griego ahogó al Efes, que gracias a algunos aciertos esporádicos y al exceso de virtuosismo adversario en momentos puntuales consiguió taponar parte de la herida (41-33). Pero los griegos sabían que en una semifinal de la Euroliga las concesiones se pagan caras, así que regresaron del intermedio con pocas ganas de contemplaciones. Seis minutos y dos triples de Fragiskos Alvertis bastaron para sentenciar.

Panathinaikos: Gentile (7), Alvertis (11), Bodiroga (22), Rogers (9), Rebraca (15), Burke (4), Katash (5), Koch (3) y Fotsis (5).

Efes: Mulaomerovic (14), Kutluay (8), Turkoglu (15), Besok (13), Drobnjak (11), Vekiloglu (3), Onan (3) y Winslow (4).