Frutos hace en el PCE un balance muy pesimista de la situación en IU Aguilar dice que la coalición puede estar ante "el principio del fin"

El que se ha convertido en líder de hecho de IU, Francisco Frutos, realizó ayer durante la reunión del comité ejecutivo del PCE un balance muy pesimista de la situación en la coalición, protagonizada, según él, por claros gestos de "deslealtad" y falta de cohesión interna. En el mismo sentido, Rosa Aguilar, alcaldesa de Córdoba, dijo que si no se aprovecha la VI Asamblea, IU puede estar ante "el principio del fin".

La reunión del PCE de ayer, según algunos de los asistentes, estuvo protagonizada por la resaca de la dificilísima situación que ha atravesado IU en las últimas semanas, especialmente a causa de la negociación del expediente de regulación de empleo y las críticas generalizadas, sobre todo del propio Frutos, a la gestión económica de años anteriores y al "despilfarro" que se produjo. El secretario general de los comunistas hizo un balance muy pesimista, en el que comentó que la coalición está ante una crisis muy grave que puede derivar, si no se corrigen los problemas, en un "repliegue sectario". "No soy nada optimista" ante la situación, llegó a decir el también presidente-portavoz del Grupo Parlamentario de IU.Esta misma línea pesimista fue seguida ayer por la alcaldesa de Córdoba, Rosa Aguilar, que no asistió a la reunión. En declaraciones a Efe dijo que si la coalición no "aprovecha bien" la Asamblea -prevista para el último fin de semana de octubre, en la que se sustituirá al coordinador general, Julio Anguita- el proyecto puede estar ante "el principio del fin", por lo que apostó por una fuerte renovación, que en su opinión debería estar liderada por Gaspar Llamazares, único dirigente que ha expresado su deseo de ser coordinador general.

Anguita, predecesor de Frutos en el cargo de secretario general del PCE, estuvo presente en la reunión, pero no intervino. Muchos dirigentes comentan casi abiertamente que su capacidad de influencia es cada vez menor.

El protagonista de la reunión fue, por tanto, Frutos, que toma cada vez más fuerza como candidato a suceder a Anguita, aunque él sigue asegurando que no le interesa entrar en esa batalla.

Llamazares sufrió una vez más la crítica de los máximos dirigentes del PCE. Especialmente por la comida que mantuvo hace tres semanas con los coordinadores de las federaciones más importantes, excluida Andalucía, en la que éstos le prometieron su apoyo a cambio de que se comprometa a otorgar mayor poder a las federaciones en los órganos de dirección de IU. Frutos llamó a esa reunión "comistrajo" y Felipe Alcaraz, líder del PCE andaluz, le acusó de estar preparando "una Asamblea contra Andalucía", la federación más importante.

Llamazares tiene aún más de seis meses para preparar su candidatura, pero su posición se debilita cada día más, ya que incluso alguno de los coordinadores que le ofreció su apoyo comienza ya a criticarle en privado porque se está quedando en un segundo plano en vez de tratar de liderar el proceso, y él mismo ha reconocido que sigue siendo candidato pero que si Frutos decide presentarse, él se retiraría.