Negre, dispuesto a dejar la presidencia de la ejecutiva de la Fira de Barcelona

El presidente del comité ejecutivo de la Fira de Barcelona, Antoni Negre, anunció ayer su disposición de dejar el cargo para que avance el proceso de refundación del consorcio de forma pactada entre la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona. Negre está de acuerdo con la propuesta de la Generalitat de entrar en la Fira presidiendo el consejo general y participando de manera paritaria con la Cámara de Comercio y el Ayuntamiento.

El presidente de la Cámara de Comercio adoptó ayer esta postura después de que la Generalitat solicitase su abandono como presidente del comité ejecutivo de la Fira de Barcelona. Recordó que la cámara tiene actualmente el 50% de los votos del consejo general de la Fira y que, por tanto, el organismo actuaría con generosidad si acepta pasar a tener una tercera parte para que entre la Generalitat. Negre se mostró satisfecho con la propuesta de la Generalitat de profesionalizar la gestión y trabajar en un plan estratégico que defina las pautas que hay que seguir, pues "nosotros ya estamos trabajando en un borrador", añadió. Por otro lado, justificó el haber compaginado en la última etapa la presidencia de la Cámara de Comercio y la del comité ejecutivo de la Fira porque "tenía la voluntad política de llegar a esta negociación y he preferido mantener los dos cargos , a pesar de que sospechaba que podía pasar por algún momento incómodo". Negre explicó que está dispuesto a llegar hasta donde sea necesario para conseguir el objetivo final de situar a Fira de Barcelona como "el centro internacional de certámenes que yo he querido desde el primer día".

A criterio de Negre, sería lógico que la Generalitat entrase en la Fira con una aportación inicial de 3.000 millones de pesetas, los mismos con los que han contribuido la Cámara, los Ayuntamientos de L'Hospitalet y Barcelona y la Mancomunidad de Municipios, pero destacó que "no hay condiciones, aunque la cifra parecería adecuada".

Sociedad anónima

Sobre la polémica suscitada a raíz de su propuesta al Gobierno central para que entre en la Fira, Negre precisó que esta cuestión se puede ver cuando se discutan los estatutos, y que hay decisiones que dependen de organismos nacionales e internacionales. En este sentido, recordó que la Fira de Barcelona necesita la ayuda de los fondos de cohesión de Bruselas para tener conexión con el metro y el aeropuerto y justificó en estos hechos su propuesta de dar entrada al gobierno central.

Para Negre, la posible conversión de la Fira en sociedad anónima, "es un tema abierto y que hay que estudiar". Respecto a la competitividad de la misma, Negre rechaza las críticas sobre una supuesta pérdida de peso económico respecto de otras instituciones feriales, y esgrime la calificación de los organismos internacionales, según los cuales, Madrid sólo tiene nueve salones internacionales frente a los 23 de Barcelona. Además, tras la nueva ampliación en Pedrosa, Fira de Barcelona contará con 140.000 metros cuadrados de exposición neta, lo que le permitirá un buen posicionamiento.

Por su parte, el portavoz de CiU en el Ayuntamiento de Barcelona, Josep Miró Ardèvol, celebró que Antoni Negre esté dispueto a dejar el cargo y mostró su deseo de que el alcalde Joan Clos también renuncie a presidir la institución. Miró, que es partidario de convertir el consorcio en una sociedad anónima, pidió que la Fira contemple la ampliación del recinto de Montjuic, aprovechando los 20.000 metros cuadrados de espacios vecinos (el Palacio de Deportes, el cuartel de bomberos, el de Guardia Urbana o la plaza de toros de Las Arenas).