La primera protesta contra la cumbre del FMI se salda con siete detenidos
La policía de Washington detuvo ayer a siete personas tras la jornada de movilizaciones de diversas organizaciones no gubernamentales (ONG) en protesta contra el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM), que esta semana celebran su asamblea de primavera. La policía de la capital de Estados Unidos ha movilizado 1.500 agentes para impedir que se repita lo ocurrido en Seattle, cuando miles de personas bloquearon la cumbre de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
A primera hora de la mañana los activistas cortaron la circulación de parte de la Avenida de Pennsylvania de Washington, donde se encuentra la sede del BM, con un camión con pancartas contra la acción de esa institución que decían: "El Banco Mundial saquea el planeta, no más dinero para petróleo, gas y minas". Al mismo tiempo, algunos activistas comenzaron a escalar la fachada del BM. La intervención policial se saldó con siete personas detenidasEl día anterior estuvo marcado por una marcha ante el Capitolio de más de 2.000 personas en favor de que el FMI y el BM cancelen de forma inmediata y sin condiciones las deudas de los países más pobres del planeta.
Las organizaciones convocantes de las protestas, entre las que se encuentran el sindicato norteamericano AFL-CIO, grupos ecologistas y ONG internacionales, tienen previsto celebrar movilizaciones toda la semana contra lo que han dado en llamar Pagana Trinidad, formada por el FMI, el BM y la OMC. El día culminante será el próximo domingo, coincidiendo con el punto álgido de las cumbres del FMI y del BM, en una marcha a la que esperan que asistan miles de personas.
Los responsables del orden en Washington llevan varias semanas preparando su dispositivo para impedir que las calles de la capital se conviertan en una reedición de lo que ocurrió a finales del pasado año en Seattle, cuando miles de personas consiguieron bloquear a las delegaciones internacionales convocadas a la reunión de la OMC. El despliegue afecta a más de 1.500 agentes, con una inversión superior al millón de dólares (unos 175 millones de pesetas) y no descartan medidas especiales de control de tráfico y del movimiento de personas.
Optimismo
A pesar de las protestas, los responsables del FMI y del Banco Mundial abordan esta semana con marcado optimismo sobre la base de unos indicadores muy positivos del crecimiento económico mundial. El informe de perspectivas incluye una proyección de crecimiento del 4,2% para este año y del 3,9% para el próximo. En el caso de la zona euro esas previsiones se sitúan en el 3,2% para los dos años. Superior es incluso la previsión para Latinoamérica, un 4% este año y un 4,7% el próximo.
El ex economista jefe del Banco Mundial, Joseph Stiglitz, has escrito en un artículo divulgado ayer que "si la gente en la que confiamos para dirigir la economía mundial, en el Departamento del Tesoro de Estados Unidos y en el FMI, no abre un diálogo y escucha a los críticos de corazón, las cosas continuarán muy, muy mal".
Por otra parte, el FMI anunció ayer que ha completado el proceso de revalorización de sus reservas en oro con transacciones realizadas con Brasil y México para financiar el alivio de la deuda de los países más pobres (HIPC). El FMI emitió un comunicado en el que señala que ha efectuado en total siete transacciones con Brasil y México en el periodo comprendido entre el 14 de diciembre de 1999 y el pasado 5 de abril.
El tesorero del FMI, Eduard Brau, comunicó que la institución vendió oro por importe de 3.500 millones de dólares (unos 612.000 millones de pesetas). Los beneficios se invertirán en un fondo cuyo rendimiento servirá para reducir la deuda de los países más pobres.
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