La explosiva mezcla y la anarquía de Verón

Si uno junta en un campo de fútbol a seis buenos jugadores argentinos, tres en cada bando, la competitividad está más que garantizada. Saltarán chispas, naturalmente, entre Kily González, el Piojo López y Pellegrino por un lado; y Simeone, Almeyda y Verón por el otro, por muy amigos que sean algunos de ellos fuera de la cancha. "El Kily está en un momento impresionante", ha dicho Simeone, y otro tanto le sucede al Cholo, que marcó de cabeza el sábado en Delle Alpi, colocando a su equipo a tres puntos del líder Juventus.Ahí precisamente radica una de las claves de la fortaleza del Lazio, en esta "mezcla explosiva", como la definió ayer Cañizares, de "suramericanos e italianos". En realidad son todos argentinos, salvo el chileno Marcelo Salas, que ha sido relegado a la suplencia por Simone Inzagui.

De entre todos ellos, Héctor Cúper tiene sus preferencias. Estuvo el sábado en Delle Alpi y ayer dijo que le impresinó el trabajo defensivo de los dos volantes: Simeone y Almeyda. "Son volantes de muchísima recuperación, cierran muy bien los espacios", señaló el preparador argentino del Valencia, que se expresó con menos admiración sobre el mucho más espectacular Juan Sebastián Verón. "Verón es bastante anárquico; siempre está buscando espacios para recibir y conectar rápidamente con su delantero".

Verón, además, es un excelente lanzador de faltas, según advirtió ayer el arquero Cañizares, que recordó que el Lazio cuenta con dos grandes especialistas: el serbio Mihajlovic y el citado Verón.

A la nómina de argentinos del Lazio se une el defensa Sensini, que, a sus 33 años, apenas juega y que llegó a ser, hace muchos años, rival de campo de Cúper en la liga argentina. Pues bien, a esta colonia argentina se agregará el próximo ejercicio el Piojo López, ya nacionalizado español desde hace un mes. Todos los ojos caerán hoy sobre él. Especialmente los del presidente del Lazio, Sergio Cragnotti, el multimillonario exportador de fruta que se ha empeñado en pagar la cláusula de rescisión del Piojo, y que ahora sueña con fichar a Rivaldo. Cragnotti llegó ayer a Valencia con su avión privado, el mismo que utiliza para recuperar a los internacionales del equipo cuando juegan en América. Cragnotti también se empeñó en sacar al Lazio en bolsa y fue el primer club italiano en hacerlo.

Ahora, el valor de las acciones se ha disparado con los últimos éxitos del grupo de Eriksson.