Kaspárov enfría a Shírov
El ímpetu del español con blancas sólo sirvió para empatar
Ayer tampoco pudo. El español Alexéi Shírov se lanzó a por Gari Kaspárov, el único miembro de la élite al que aún no ha logrado ganar. Hubo mucha tensión, apuros de tiempo, lucha vibrante y muy complicada, pero terminó en tablas. A falta de cuatro rondas para la clausura en Linares, Kaspárov comparte el primer puesto con su compatriota Vladímir Krámnik; ambos aventajan en un punto al prometedor húngaro Peter Leko.¿Ha sido muy duro, no?, preguntó El PAÍS a Kaspárov cuando salía del escenario. Con cara de pocos amigos, él sólo dijo una palabra en inglés: "Jodido". No aclaró si se refería a lo mucho que apretó Shírov o si resumía así su malestar por no haber ganado. Leko, que a pesar de su juventud (20 años) ya conoce bastante bien al Ogro de Bakú, creyó entender la respuesta: "En su maximalismo, Kaspárov se siente obligado a ganar todos los días. Cuando no lo consigue, cree que ha estado muy cerca. Desde el punto de vista deportivo, ésa es una virtud que yo admiro porque nos pone el listón muy alto a todos los demás y produce noticias. Pero hay veces que Kaspárov no tiene razón, como ayer contra mí y hoy frente a Shírov".
Ciertamente, la única conclusión clara de los análisis entre Kaspárov y Shírov fue que la partida y sus posibles variantes son muy complicadas, incluso para ellos. El desarrollo de la lucha engarzó lógicamente con los antecedentes: "Sólo me falta la bestia", comentó Shírov (4º del mundo) unos días antes tras subrayar que él fue el causante de las últimas derrotas de Krámnik (3º), Leko (6º) y el indio Viswanathan Anand (2º). De modo que era una gran oportunidad para el español, con las piezas blancas.
Además, la inquina contra Kaspárov planeaba sobre el escenario. Casi ninguno de sus colegas le aprecia como persona, y menos aún Shírov: tras ganarse el derecho de retarle en 1998 por el título del Consejo Mundial de Ajedrez con 300 millones de pesetas en premios, el español fue ignorado por Kaspárov, que prefirió buscar un patrocinador para enfrentarse a Anand porque "Shírov es poco comercial". Esa herida aún no se ha cerrado.
Según reconoció después el español, el primer momento clave de la partida llegó en la jugada 22. Sus piezas apuntaban peligrosamente contra el flanco de rey. El ruso tenía que elegir entre aceptar el riesgo de mantener el rey en el centro o enrocarse por ese lado, lo que parecía suicida. Pero eso fue precisamente lo que hizo: "Un ser humano normal no tendría redaños para colocar el rey ahí, por pura intuición o instinto de supervivencia. Pero Kaspárov es distinto", comentó el gran maestro cubano Amador Rodríguez, entrenador de Leko.
"Esa jugada me descolocó", admitió Shírov. "Es probable que pueda mejorar mi juego después, pero aún no he encontrado cómo", añadió mientras se dirigía a su habitación. Aún hubo varios momentos en los que parecía que Shírov podía montar un ataque letal pero, como explicó Rodríguez, "Kaspárov juega ese tipo de posiciones como si se levantara pensando en ellas". Y el empate, tras casi cuatro horas de pelea, dejo el balance de las 17 partidas entre ambos con nueve victorias para el ruso y ocho tablas.
Leko demostró, con negras frente a Anand, que su preparación es formidable. La gran belleza de las últimas jugadas originó una gran excitación en la sala de prensa, que se transformó en asombro cuando habló el húngaro: "He jugado toda la partida de memoria. Había preparado esa variante para mi duelo contra Jálifman en enero. Y como no pude utilizarla, la tenía en conserva". El empate deja a Leko muy bien clasificado, a la espera de un pinchazo de Kaspárov o Krámnik; éste rozó la victoria frente a Jálifman, pero también repartió el punto.
Clasificación: 1º-2º Kaspárov y Krámnik 4; 3º Leko 3; 4º-5º Shírov y Jálifman 2,5; 6º Anand 2.
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