El viento dificulta la extinción de un incendio que obliga a desalojar una urbanización en Alcover

Un centenar de vecinos de la urbanización Masies Catalanes, en Alcover (Baix Camp), fueron evacuados ayer por la tarde cuando un incendio, acrecentado por el fuerte viento que sopló durante toda la tarde con ráfagas de más de cien kilómetros por hora, amenazaba con llegar a sus viviendas. La simultaneidad de tres incendios en Tarragona obligó al Departamento de Interior a activar el Plan Infocat en situación de alerta. Además, Interior reservó 200 plazas en la Ciudad Residencial de Tarragona por si alguno de los evacuados carecía de vivienda alternativa. Ninguno hizo uso de la reserva. De madruga, dos de los tres frentes del incendio estaban controlados y el tercero continuaba ardiendo.

El centenar de vecinos que habitan en la urbanización Masies Catalanes de Alcover fueron evacuados por la Guardia Civil ante la proximidad y la virulencia de las llamas de un incendio forestal que se inició a las cinco de la tarde entre esta urbanización y la de Bon Retorn por causas desconocidas. Dos casas de esta urbanización quedaron más tarde seriamente dañadas por el fuego.En algún momento de la tarde, la población de L'Albiol se vio rodeada por el fuego y sólo la intervención de 21 vehículos de bomberos permitió reabrir el camino a la villa, que al final no precisó ser evacuada. El incendio, avivado por el fuerte viento que sopló en toda la provincia, con rachas de entre 90 y 100 kilómetros por hora, obligó a cortar las carreteras de acceso a la población y la comarcal 240.

El fuego se centró en la zona situada entre Alcover, población de 3.664 habitantes; L'Albiol, de 140; y La Selva del Camp, de 3.700. El viento amenazó con extenderlo hacia Vilallonga del Camp, de 1.200 habitantes. La virulencia del fuego motivó que las tareas de extinción se centraran principalmente en evitar daños a las personas y las propiedades y en disponer lo necesario para la eventual evacuación de las poblaciones. El consejero de Interior, Xavier Pomés, estuvo hasta bien entrada la noche coordinando los trabajos desde el Ayuntamiento de Alcover.

Además de los 21 vehículos, un helicóptero se sumó a las tareas de extinción, pero la llegada de la noche y la fuerza del viento hicieron desistir a los bomberos de su actuación. Durante la noche otros vehículos y bomberos procedentes de los parques de Bomberos de la Generalitat de Lleida, Girona y Barcelona fueron sumándose a las tareas de extinción del fuego. Además, los Mossos d'Esquadra realizarán hoy con sus vehículos el transporte de los relevos de las dotaciones de bombreros que han estado toda la noche luchando contra el fuego para evitar restar de la primera línea las unidades y camiones bomba.

A las nueve de la noche el fuego había devastado entre 300 y 350 hectáreas de bosque y cultivos. El Ayuntamiento de Alcover hizo anoche un llamamiento para que hoy se sumen nuevos voluntarios a las tareas de extención.

Las asociaciones de defensa forestal de la zona se sumaron también a las tareas de extinción. La escasez de lluvias registrada en la zona durante el invierno y el feurte viento colaboron en gran manera en la extensión virulenta del fuego.