Crivillé vuelve a España, pero descarta cualquier dolencia grave

Àlex Crivillé llegará hoy a España procedente de Australia. Después del desmayo que sufrió el miércoles al término de una jornada de entrenamientos en Phillip Island, los doctores que le atendieron le recomendaron que regresara a casa para someterse a un chequeo por los médicos de su confianza. Sin embargo, la enfermedad del campeón del mundo no parece grave y se atribuye, en principio, a un virus estomacal.La lipotimia que afectó a Crivillé precisamente el día que estrenaba su nueva moto para la temporada 2000 obligó al piloto catalán a suspender los ensayos en Australia y probablemente también la siguiente tanda, programada para la semana que viene en Suráfrica. Llegará, por tanto, con pocos kilómetros de rodaje al primer gran premio de la temporada, que se disputará también en Suráfrica el próximo 19 de marzo.

Los doctores que le atendieron inicialmente en Cowes, la localidad más cercana al circuito de Phillip Island, ni siquiera emitieron un parte médico, y descartaron cualquier dolencia seria. Incluso permitieron que Crivillé retornara solo a España, en un viaje de prácticamente 30 horas. El plan del noi de Seva en cuanto llegue a Barcelona será irse a casa de su madre a descansar, y ponerse en manos de los médicos la próxima semana.

La baja temporal del actual número uno supone un revés importante para Honda. En las últimas semanas, la marca japonesa atraviesa por una mala racha: además del susto de Crivillé, otro de sus pilotos de 500cc, Tadayuki Okada, sufre aún las consecuencias de una caída en la que se golpeó la cabeza y que le provoca problemas en la visión.