El juez rechaza cerrar el caso del joven que mató a otro a martillazos

Un juez de Madrid rechazó ayer la petición de sobreseimiento, por legítima defensa, presentada por el abogado del joven acusado de matar de un martillazo en la cabeza a un vecino que tenía alta la música a deshoras. El juez acordó, asimismo, que el caso continúe tramitándose para ser juzgado en su día por el procedimiento del jurado. El crimen ocurrió la madrugada del sábado 23 de enero, en un edificio de Carabachel. La víctima, Miguel Á. R., tenía la música muy alta y su vecino -el agresor, Javier M. C., de 19 años- le asestó un martillazo en la cabeza tras una acalorada discusión entre ambos por el volumen de la música.El abogado del acusado, Jaime Sanz de Bremond, pidió ayer el sobreseimiento del caso. El juez, sin definir aún el delito, rechazó esta y otras peticiones formuladas por las otras partes -prueba pericial, ampliación de la autopsia...- y entendió que el sumario debe proseguir.

Sanz de Bremond defiende que su cliente, que ha trabajado en la construcción, asió un martillo que utilizaba para sus tareas domésticas después de que su vecino, el de la música alta, "se acercase a él y a su esposa para pincharles con un cuchillo y un destornillador". "Le golpeó con lo primero que tenía a mano, pero con la desgracia de que le dio en la cabeza", señaló el letrado.

El juez no adoptó ninguna medida cautelar contra el acusado, que permanece en libertad provisional, pese a que el fiscal ha pedido prisión para él.

El abogado de la familia, Jaime Serrano, afirma que dispone de una carta firmada por 400 compañeros de trabajo de la víctima en la que éstos muestran su indignación por los comentarios lanzados tras el crimen sobre la conducta de su cliente.