"Contribuiré a abrir el partido, aunque sea a patadas"
Ricard Pérez Casado ha entrado en el 2000 decidido a retornar a la primera línea de la actividad política, pese a que nunca ha abandonado esta actividad pública. El pasado sábado en su primer acto público como número tres de la lista al Congreso del PSPV-PSOE por Valencia aseguró: "Mi retorno va para largo, es un aviso para dentro y para fuera de la casa".Pregunta. ¿Qué quiso decir?
Respuesta. Los partidos son instrumentos de la sociedad y por tanto han de ser permeables a ella. El partido ha de estar abierto a la sociedad para que la sociedad entre. Si queda alguna estancia cerrada en el partido esté seguro de que contribuiré a abrirla, aunque sea a patadas. Después de todos estos años, cuando uno retorna a la primera línea de la política retorna con todas las consecuencias teniendo en cuenta dos elementos clave: la lealtad a la organización y la fidelidad a las convicciones.
P. Usted ha ocupado cargos en los que ha demostrado liderazgo social, pero ha carecido de liderazgo orgánico. ¿Cuáles son sus ambiciones en el seno del PSPV-PSOE?
R. El 13 de marzo hablaremos de eso. Mi retorno se ha producido sin condiciones por parte de nadie. La única cosa que he hecho ha sido la de imponerme la dedicación a la sociedad, que es lo que ha hecho siempre. Ni tengo benefactores, ni soy benefactor.
P. ¿Qué personas han influido más en su decisión de retomar protagonismo político?
R. Nunca me ha preocupado la dificultad por entender que la política es un servicio a la sociedad. En política nadie es propietario de una idea, sino que ésta pertenece a la sociedad. Hay personas de las que, en los casi 11 años en los que he estado apartado de la vida politica pública, he aprendido mucho. Entre éstas personas destacan Javier Solana y Pasqual Maragall, que además de ser cofrades de partido tienen la capacidad de unir las ideas a la organización. He estado muy cerca de ellos, con ayudas de todo tipo, y son líderes políticos que han tenido siempre una consideración humana por encima de cualquier tentación. Tienen un largo camino por delante.
P. ¿Entre el modelo de Estado que propugna Maragall y el que defiende Almunia con cuál se queda?
R. La izquierda es plural y esto es positivo en un momento de globalización. Entre la propuesta de Maragall, la mas abierta, plural y audaz, y la de Almunia hay una confluencia básica que es menester subrayar: ambos se plantean el objetivo de cambiar la sociedad para que ésta pueda ser más abierta. En las primarias del PSOE voté por Almunia y, por otra parte, no hay duda de mi participación en las propuestas que ha realizado Maragall sobre el federalismo asimetrico. En definitiva, esa confluencia entre una transformación de todo el Estado y el reconocimiento de las diferencias puede extrañar a una derecha uniformadora, pero no a la izquierda. Veo que hay confluencia entre la propuesta de pluralidad de Maragall y la propuesta de Estado de Almunia.
P. Le han criticado por compatibilizar su puesto en la Fundació Bancaixa con su futuro cargo de diputado nacional. Opine.
R. Las fundaciones benéfico sociales tienen un objetivo social y generoso. Desde el punto de vista moral hay compatibilidad absoluta y, en este caso, legal. Soy miembro de la dirección de varias fundaciones, como la de la Infancia y la Juventud, donde soy director científico, o la de Tolerancia y Solidaridad, donde estoy en la junta directiva. Lo que no se puede es ser miembro de un consejo de administración.
P. ¿Cómo va a contribuir en la campaña electoral?
R. Como responsable político mi obligación es atender los proyectos de la sociedad dentro de la circunscripción. Me he de preocupar de plantear los temas que afectan al País Valenciano y a la ciudad de Valencia. Invitaré a todos los progresistas a iniciar el camino para el cambio.
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