Lander Iglesias dirige en "Birus" una fábula de personajes informáticos en busca de la utopía
Los protagonistas de Birus, "una comedia épico-informática en un electroacto", son virus de ordenador, acorralados dentro de una computadora en el último segundo de su vida. Sobre esta historia el grupo bilbaíno Txirene, integrado por Lander Iglesias, Patxo Telleria y Aitor Mazo, ha compuesto una fábula sobre una huida en busca de la utopía. "Son personajes fuera del sistema que descubren que solos no pueden perseguir el sueño que les libere y les haga felices", explica Iglesias, director del montaje. Birus se estrena hoy en el Teatro Arriaga de Bilbao.
Birus, escrito con b con un afán a medias entre el espíritu transgresor de los virus informáticos protagonistas de la comedia y de la broma ortográfica, es la segunda obra de la productora Txirene, fundada en Bilbao en 1997. Su primer trabajo fue Torito bravo, otra fábula con dos toros de lidia que filosofaban sobre su existencia en medio de la dehesa.Con Birus han querido seguir la huella de Torito bravo, galardonada con un premio Max por la calidad de su música, y crear "un producto de marca". Su búsqueda comienza por escribir un texto original y por controlar todas las fases de la dramaturgia del montaje. "Trabajamos con la perspectiva de una creación integral; toda la estética esta pensada con el mismo objetivo", dicen. "Trabajamos con textos nuevos porque los conflictos y las emociones de la sociedad también son nuevos"
Iglesias explica que los tres componentes de Txirene - "cómicos de toda la vida", se autodefinen, que comparten su dedicación a la compañía con otros trabajos en series de televisión, cine y otros proyectos teatrales- tienen una misma concepción de los espectáculos teatrales. Sus papeles dentro del grupo están bien repartidos. "Yo entro en lo que es la creación de una estética: el espacio escénico, el vestuario ... Patxo se encarga de darle un estilo, jugando con el lenguaje. Y Aitor es un ideador, que está en los dos frentes", añade.
Los virus de este montaje son "algo parecido a piratas malhechores", dice Telleria, el autor del texto, que sirven para ironizar sobre los tiempos que les ha tocado vivir a caballo entre el siglo XX y el XXI, en el imperio de los avances informáticos. "Son dos cacharros viejos con la utopía de salir al mundo, de escapar de la cárcel del ordenador". Iglesias asegura que no tienen vocación de especialistas en fábulas. La coincidencia entre las dos primeras obras producidas por Txirene es, un su opinión, mera casualidad. "Utilizamos la excusa de unos personajes de ficción que, como en el teatro de siempre, se parecen a los reales", señala el director de Birus. "El teatro provoca una pequeña rebelión. En este caso, es que los protagonistas descubren que no existe una salida individual, que solos no pueden alcanzarla. Les salva el buscar juntos la utopía". La elección del tema y su estética, cercana al cómic por su estructura en viñetas y el colorido del escenario, pretende lograr una obra "de amplio espectro", que resulte accesible al público más joven, poco habituado a asistir al teatro.
Birus se presenta hoy al público en el Teatro Arriaga, donde permanecerá en cartel hasta el domingo. La versión en euskera se estrenará el 24 de febrero en San Sebastián.
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