Tormenta en el Vaticano al plantear el jefe de la Iglesia alemana la dimisión del Papa

Unas declaraciones del presidente de los católicos alemanes, el obispo Karl Lehmann, acerca de una posible dimisión del Papa por motivos de salud, han provocado una conmoción en la jerarquía de la Iglesia, hasta el punto de que el propio Pontífice advirtió ayer: "Dios no nos pide nunca que afrontemos tareas por encima de nuestras fuerzas". Retomando un debate lanzado el año pasado por el papable Carlo Maria Martini, arzobispo de Milán, Lehmann se había referido al "valor" y la "fuerza moral" del Papa para renunciar "en caso de que no se sienta capaz de dirigir la Iglesia con responsabilidad". Tras las duras reacciones de varios cardenales, Lehmann precisó que en ningún momento propuso la dimisión del Pontífice.