Esquerra y EA pactan al margen de convergentes y peneuvistas

Esquerra Republicana y Eusko Alkartasuna (EA) han descartado respaldar la Declaración de Barcelona, apoyada por el PNV, CDC, UDC y BNG, y han optado por concertar, ante los próximos comicios generales, su propio pacto de alianzas poselectorales y un programa común en el Congreso. El acuerdo, que se firmará la semana próxima en Pamplona y que previsiblemente recibirá el nombre de Declaración de Iruña, comprometerá a ambas formaciones a no apoyar "a ningún gobierno que bloquee el proceso de paz en el País Vasco". El vicesecretario general de ERC, Josep Huguet, señaló que, tras la reunión de Santiago de Compostela, en la que la Declaración de Barcelona "confirmó su carácter simplemente moral", su partido ha optado por una plataforma política que reclame el derecho a la autodeterminación para las nacionalidades históricas.

"La vía del particularismo vasco o catalán que defienden el PNV y CiU ha tocado techo y no da más de sí. Nosotros creemos que la única manera con la que puede darse la vuelta a una concepción jacobina del Estado es concertando entre varios partidos una plataforma de acción conjunta para cambiar los estatutos autonómicos y la Constitución", afirmó Huguet.

El programa electoral de mínimos que pactarán ERC y EA prevé reivindicaciones soberanistas, que suponen la reforma del marco constitucional y autonómico, y aspectos de política social y de transparencia democrática. Entre estas reivindicaciones figuran que la Administración en Cataluña, Euskadi y Galicia dependa sólo del Gobierno autónomo y que tenga representación en organismos internacionales.