Los violentos atacan en la misma noche a dos militantes socialistas y a un agente de policía

Tres ataques con cócteles mólotov en una sola noche indican a las claras que la violencia callejera se ha reactivado con fuerza en el País Vasco y Navarra. El comercio de la hija de un militante socialista en San Sebastián fue incendiado un par de horas después de que la madre de una edil del mismo partido en Andoain repeliera a gritos un ataque con bombas incendiarias contra su piso. Casi al mismo tiempo era atacada la casa de un policía en Villava (Navarra). El secretario general del PSE-EE, Nicolás Redondo Terreros, indicó ayer que lo único que motiva estos incidentes es que sus víctimas no son nacionalistas.

El ataque contra la tienda de ropa de la hija de un militante socialista, en la calle Miracruz del barrio de Gros de San Sebastián, se produjo a las 23.00 del miércoles. Varios encapuchados rompieron el escaparate del comercio y le prendieron fuego. El incendio causó importantes daños en el establecimiento. Las llamas no afectaron al resto del edificio, ya que fueron sofocadas rápidamente por los bomberos sin que fuera preciso evacuar las viviendas del bloque.Este atentado se produjo dos horas más tarde de que un grupo de encapuchados atacase el piso de la concejal socialista de Andoain María Ángeles González, sita en la calle Arrate de esta localidad guipuzcoana. En el momento del ataque, la edil no se encontraba en su casa, aunque sí estaban sus padres y dos hermanos.

Julio González, padre de María Ángeles González, relató ayer que, poco antes de las nueve de la noche, mientras estaban cenando en la cocina, oyeron un ruido seco -"un pum", según sus propias palabras- en la habitación contigua. Su mujer se asomó entonces a la ventana y vio a tres encapuchados dispuestos a lanzar otra botella contra el piso, pero los gritos de la mujer disuadieron a los atacantes, que se dieron a la fuga. La propia familia González sofocó el incendio con mantas y con la ayuda de algunos vecinos. Hace unos días, en las calles de esta localidad aparecieron pintadas en contra de los ediles del PP y el PSE.

El último ataque se produjo ya en la madrugada de hoy contra la vivienda de un funcionario de policía, en la calle Sancho el Sabio de la localidad navarra de Villava. Cinco artefactos incendiarios impactaron contra la fachada del inmueble sin provocar más daños que unas manchas en la pared.

Dos cajeros quemados

Con éstos ya son cuatro los ataques protagonizados este año por violentos proetarras. Además, ayer por la tarde unos desconocidos embozados con capuchas quemaban dos cajeros automáticos de sendas sucursales del Banco Guipuzcoano y del Banco Central Hispano en San Sebastián, según informaron los bomberos de la capital donostiarra.

El año pasado fueron perpetrados 390 actos de vandalismo en Euskadi y Navarra, según un balance facilitado ayer por el Ministerio del Interior, detallado en el gráfico adjunto. Los objetivos más frecuentes fueron edificios y bienes públicos (135 acciones), bienes de personas (especialmente de militantes y cargos públicos del PP y el PSOE, con 114) y edificios de bancos y empresas privadas (112).

El secretario de los socialistas vascos, Nicolás Redondo Terreros, visitó ayer el domicilio de la concejal de Andoain acompañado de los miembros de la ejecutiva Jesús Eguiguren y Rodolfo Ares para mostrar su solidaridad a la edil y su familia. El dirigente del PSE declaró, justo bajo la ventana en la que eran perceptibles las señales del ataque incendiario, que la única explicación que existe de estos actos es que están dirigidos contra quienes no son nacionalistas y, por tanto, no piensan igual que sus autores.

Para el presidente del PP de Guipúzcoa, Ricardo Hueso, el "acoso a los no nacionalistas" vuelve a ser perceptible. Hueso condenó los ataques sufridos por las dos militantes del PSE-EE y advirtió de que la violencia callejera constituye la puesta en práctica de las instrucciones de ETA, que consisten en "acosar a quienes no comparten el programa de Estella".El portavoz del PNV en el Congreso, Iñaki Anasagasti, condenó sin paliativos los asaltos y pidió a quienes los provocan que "recapaciten durante media hora" y defiendan con la palabra lo que reclaman de "forma salvaje". Según Anasagasti, los autores de estos actos tendrán que admitir que "por ese camino no se va a ninguna parte; lo único que están haciendo es dar munición verbal a los violentos". Y se mostró contrario a cualquier expresión de violencia, que calificó de "absurda y carente de sentido". El portavoz peneuvista recordó que la manifestación convocada por el PNV, EA e IU-EB el 15 de enero también se orienta a exigir el fin de la violencia callejera.

El coordinador general de IU-EB, Javier Madrazo, condenó estas acciones y acusó a sus autores de ser "auténticos saboteadores de la paz y los derechos humanos". Madrazo destacó que hoy en día es una necesidad manifestarse contra la violencia y quienes la practican y llamó a los ciudadanos a movilizarse el día 15. IU es, junto con PNV y EA, uno de los organizadores de la concentración convocada para ese día en Bilbao contra el "inmovilismo" de los Gobiernos de España y Francia y en demanda de que ETA reanude la tregua.