La telefonía móvil superará a la fija en España en el año 2000

El mercado español de la telefonía móvil terminará el año con unos 15 millones de clientes y 13 millones de teléfonos vendidos. A finales del año pasado, el número de clientes rondaba los siete millones, lo que significa no sólo que se ha duplicado esa cifra, sino que existe una importante tasa de renovación de terminales. Amena, que empezó a prestar servicios hace menos de un año, terminará el ejercicio con más de 850.000 clientes y Airtel cuenta ya con 4,5 millones de abonados, 600.000 más que los presupuestados al comienzo de curso.Según las últimas previsiones difundidas por la compañía estadounidense Motorola, el próximo año se venderán en España 18 millones de teléfonos móviles y se alcanzará la cifra de 22 millones de clientes. Eso significa que se van a superar ampliamente el número de líneas fijas instaladas, alrededor de 18 millones, prácticamente todas ellas, salvo muy contadas excepciones, propiedad de Telefónica.

En lo que respecta a los fabricantes, Motorola es el primer vendedor de teléfonos móviles en España, según datos hasta septiembre, con el 25,2% de la cuota del mercado, seguida de Nokia, con el 17,8% y Ericsson con el 16,9%, según cifras de la empresa estadounidense.

Un aspecto importante en la gestión de las operadoras de móviles es la explosión de las tarjetas prepago, que no exigen contrato entre los clientes y las compañías y que alcanzan, según fuentes de las empresas de telefonía, cerca de un 60% del total del mercado.

Estrategia diferente

La importancia del prepago ha llevado incluso a los directivos de Airtel ha plantearse en la última comisión ejecutiva una revisión de la estrategia de la compañía. Para algunos de sus miembros, entre los que no se encuentra el BSCH, Airtel debe apostar por mantener el núcleo del negocio, la telefonía móvil, e intentar retener al mayor número de clientes fijos. Esa postura es claramente defendida por Vodafone Airtouch, la primera operadora de móviles del mundo, y reacia a emprender actividades de fija. BT, por contra, representa la otra postura; la de aquellos que apuestan por un mayor desarrollo de las actividades en Internet y la telefonía fija y por el desembarco en negocios multimedia.