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Tribuna:DÍA A DÍA
Tribuna
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El "titot indià"

Manadas de gallos y pollas de India por las calles anunciaban las fiestas. La mesa del altar doméstico se preparaba para acoger la víctima. Los indians con máscaras de sarao carnavalesco, en respuesta a la provocación infantil de llamarles ¡polit mocós!, proclamaban el bando -¡glu, glu, glu!- de sus graznidos: El titot va pel corral / orgullós i criant greix. / Ell sent dir que està ilustrós / ¡i qui ho diu és l"ememic! Els titos són innocents i a la mort van pel seu pas / ¡Quin fracàs! Empezaban las antiguas ferias navideñas y los agricultores y masoveros portaban sus animales de pluma a la ciudad, pagaban los arriendos a los señoritos y se proveían para els Nadals.Un día propicio, hoy, no porque aquel pollo de Santoña, gran visir del pequeño califa ferrolano, volara sin alas, propulsado sin duda por un ansioso ardor de gloria eterna en quien inventó una manera, para él, limpia y cómoda, de abatir peligrosos estudiantes: cuando éstos planeaban por el nuboso cielo, la policía disparaba al aire. Al llevar el pelo largo, no eran nadie, según Carrero: "Se trata de formar hombres y no maricas, y esos melenudos trepidantes no sirven este fin". Con su triple salto mortal provocó, milagrosamente, una inundación de cava en Hispania. Es buen día por ser santo Domingo, del año mil, especialista en evitar hurtos de nabos de monje (lo cuenta Berceo: "Cavaron en la huerta de la mongía, / mas rancar non pudieron puerro nin chirivía") y en aves de corral: un moro de Berbería -hoy empieza el Ramadán- encerró un cristiano en un arca de piedra y sobre ella puso un guardián, un perro, un gallo y su gallina. Los hizo despegar y en un santiamén llegaron a Silos. El gallo y la gallina procrearon y el gallinero monacal sigue formado por sus biznietos. No se sabe qué hicieron el policía y el perro.

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