¿Una institución benéfica?

Según el artículo 1 de los estatutos del Colegio de Huérfanos de Ferroviarios, esta institución esPasa a la página siguiente

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una "Asociación sin ánimo ni fines lucrativos", y en el artículo 2 se señala que su objeto fundamental se concreta en "...el ejercicio de una acción protectora, asistencial y social, respecto a sus asociados, actuando con esos fines tanto en el campo de la protección de la orfandad como en el de la formación y el empleo, tercera edad, el aseguramiento, el ocio...".

Pues bien, el edificio del Colegio de Huérfanos de Ferroviarios situado en la calle de los Pirineos de Madrid, que en el pasado se dedicó a la atención de los huérfanos de ferroviarios, actualmente sirve a otros fines que no están recogidos en dichos estatutos.

Concretamente, en el terreno en que está construido el edificio se ha levantado un inmueble que ocupa la Universidad privada de Nebrija.

Solicitamos que el Colegio de Huérfanos de Ferroviarios cree una residencia de ancianos en Madrid que sirva también de punto de encuentro para los afiliados de esta institución que fundaron nuestros padres, y en la que muchos de nosotros pasamos nuestra niñez en régimen de internado.

Quiero señalar que ya hemos solicitado en varias ocasiones y por distintos medios que se lleve a cabo esta iniciativa (incluso con escritos avalados por más de 65 firmas). Queremos que el Colegio de Huérfanos de Ferroviarios cumpla con los fines que constan en sus estatutos y abandone una gestión que, en muchos casos, se centra en operaciones especulativas.

La sociedad del Colegio de Huérfanos de Ferroviarios cuenta en estos momentos con 30.000 socios. Eso sin contar a los empleados de Renfe que cuando pasaron a depender de la Seguridad Social fueron dados de baja, tras muchos años de cotización, porque no recibieron ninguna notificación de que a partir de ese momento las cuotas de la asociación debían pagarlas de su bolsillo.

En definitiva, sólo exigimos que se cumplan los estatutos y que se atienda nuestra petición de fundar en Madrid esa residencia para la tercera edad, que tanta falta hace y cuya creación sí que respondería a los fines fundacionales de la asociación.- .