EL SOMBRERO DE SABINA
Los aficionados al fútbol de Buenos Aires estaban intrigados por el aspecto de Juan Román Riquelme: el volante de Boca Juniors -e internacional de la selección argentina- se presentaba en concentraciones, viajes y hasta en la cancha de la Bombonera con un sombrero. El diario Clarín acaba de revelar el secreto: se trata de un regalo de Joaquín Sabina, en agradecimiento a que el jugador pasó a saludarle por el camerino del teatro porteño donde actuaba. La noticia ha sellado el pacto de cariño entre el cantante y la bulliciosa afición de Boca, a la que Joaquín dedica Dieguitos y Mafaldas, una canción de su reciente disco, 19 días y 500 noches. Una relación que, sin embargo, puede agriarse si se confirma el rumor de que Riquelme jugará la próxima temporada en el Atlético de Madrid, el club español que cuenta con las máximas simpatías de Sabina.- ,
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