El CSN propone sancionar a la central de Cofrentes por faltas leves

La central nuclear de Cofrentes (Valencia) incumplió varias normativas del proceso de arranque que realizó tras la parada efectuada en mayo, según el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN). El organismo que regula la seguridad de las centrales nucleares españolas ha decidido proponer al Ministerio de Industria una sanción para Cofrentes por falta leve debido a tres defectos de forma producidos en las operaciones de arranque de la central. En ningún caso hubo riesgos para el personal que participó en la operación, a juicio del CSN.

La propuesta de apertura de un expediente sancionador responde, según el CSN, a tres incumplimientos "formales" en el proceso de arranque de la central realizado el pasado mayo. A juicio de la entidad que supervisa el funcionamiento las centrales nucleares españolas no se registraron por escrito datos sobre la temperatura del agua de alimentación del reactor y tampoco estuvo operativa una pantalla que confirma la señal de alarma que se activa en caso de riesgo de inestabilidad termohidráulica. Las centrales similares a las de Cofrentes (con un reactor que funciona con agua en ebullición) cuentan con el riesgo de sufrir este tipo de problema durante los procesos de arranque. La variación de potencia en el reactor que sufre la central al volverse a poner en marcha puede producir daños en el combustible. Para evitar que se produzca esta situación, durante la última carga se estrenaron unos sistemas automáticos de protección destinados a provocar la parada inmediata de la central ante la presencia de inestabilidades termohidráulicas en el núcleo, entre los que se encontraba la alarma que no se encontró operativa durante el proceso.

El Consejo de Seguridad Nuclear también observó un incumplimiento del manual de garantía de calidad de la central al no tener actualizados por escrito algunos de los procedimientos que se siguieron con los nuevos equipos de seguridad. Una vez Industria reciba la recomendación del CSN, el departamento que dirige el ministro Josep Piqué será el responsable de imponer la sanción, de tipo económico, regulada en la ley del sector eléctrico, que puede elevarse hasta 10 millones de pesetas en el caso de las faltas leves.

Comparecencia en Cortes

A raíz de la propuesta del CSN, el grupo parlamentario de Esquerra Unida ha solicitado la comparecencia en Cortes del director de la central de Cofrentes, Mariano Gómez. El portavoz de EU, Joan Ribó, calificó ayer la actitud del CSN de "muy poco usual" y señaló que se ha ocultado información. Para Ribó, la mejor forma de que Cofrentes sea segura "es cerrar" la central y denunció que "está supeditada a la rentabilidad de la empresa" que "antepone de forma descarada" el rendimiento económico a la seguridad. Ecologistas en acción se sumó ayer a las críticas de EU y solicitó la paralización de la central nuclear hasta que se corrijan las "graves deficiencias" que afectan al sistema de protección contra inestabilidades termohidráulicas que, afirman, "han provocado un conflicto entre los inspectores y la dirección del CSN".

Mientras, el delegado del Gonbierno en la Comunidad, Carlos González Cepeda, entregó ayer a los alcaldes de varios municipios de la comarca de Ayora cercanos a Cofrentes los planes municipales de emergencia nuclear actualizados.