El presidente de la Generalitat, satisfecho de que la oposición sólo critique a un consejero

VIENE DE LA PÁGINA 1 Más allá de las críticas genéricas, los líderes parlamentarios reaccionaron ayer airados al nombramiento de Vilajoana como consejero de Cultura. Esta decisión ha levantado ampollas incluso en los sectores de la propia Convergència Democràtica de Catalunya vinculados al mundo cultural, que consideran que Vilajoana no tiene el "perfil adecuado".

Ayer, todos los partidos de la oposición recordaron el pasado del nuevo consejero como responsable de la publicidad de Convergència y su actuación al frente de la Corporación Catalana de Radio y Televisión (CCRTV). "Es una buena noticia que se lo quite de la CCRTV, pero es una mala noticia que se le sitúe en Cultura", afirmó ayer Nadal. El portavoz socialista mostró su "sorpresa" por la designación y subrayó que Vilajoana "no se ha caracterizado, hasta ahora, por tener la política cultural entre sus prioridades".

Grave provocación

Con más dureza todavía se expresó el portavoz de IC-V, Joan Boada, quien consideró que el nombramiento es una "grave provocación al país" y tildó de "sectaria y partidista" su gestión al frente de la CCRTV. "Tememos que Vilajoana sea un vendedor de la cultura del régimen pujolista", afirmó Boada. A su jucio, del mismo modo que "manipulaba desde la Corporación puede manipular ahora desde Cultura". "Vilajoana se puede convertir en una Esperanza Aguirre a la catalana", concluyó. Por su parte, el presidente del grupo parlamentario de ERC, Josep Lluís Carod, reiteró ayer las ásperas críticas que la formación republicana ha destinado a Vilajoana en los últimos días.

Cuando su nombramiento era sólo un rumor, ERC lo asoció al "sector de los negocios" de Convergència. Ayer, Carod añadió: "Vilajoana ha confundido la reactivación de la industria cultural con la publicidad".

El jefe del Grupo Popular, Alberto Fernández, fue más comedido, pero no dejó pasar la ocasión para mostrar sus dudas sobre la idoneidad de Vilajoana para ocupar la consejería de Cultura. "Teniendo en cuenta sus anteriores responsabilidades", dijo, "su designación no deja de sorprendernos". No obstante, Alberto Fernández, que con sus votos facilitó la investidura de Jordi Pujol, aplazó cualquier análisis más promenorizado hasta que se haya celebrado el pleno monográfico sobre medios de comunicación públicos, previsto para los días 14 y 15 de diciembre. " No queremos enturbiar el debate", señaló.

Vilajoana se defendió del torrente de críticas que su designación ha provocado entre todos los partidos de la oposición y optó por vender sus cualidades. El consejero de Cultura afirmó que durante su carrera ha trabajado en sectores en los que se valoraba la creatividad y el talento, informa Efe: "Creo que la cultura necesita también talento y lo que intentaré es potenciar la creatividad de la sociedad catalana", aseguró.

Buena acogida

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, defendió su elección y se mostró irónico con la oposición: "De salida podemos decir que es un Gobierno exitoso porque sólo se critica a un consejero". Sobre este consejero añadió: "¡Que no se quejen! La oposición ha puesto siempre el acento en incentivar las industrias culturales y de ello Vilajoana tiene una amplia experiencia". De hecho el único sector que respondió positivamente al nombramiento fue el de los productores cinematográficos, quienes lo consideran un profundo conocedor del sector en cuestión.

La decisión de colocar a Vilajoana al frente del Departamento de Cultura se produjo el pasado viernes, después de una larga conversación entre Artur Mas, consejero de Economía, Finanzas y Planificación, y el presidente Pujol.

Vilajoana es un hombre de la confianza de Mas, quien no ha dudado en proponerlo para Cultura en la guerra de posiciones que mantiene con Josep Antoni Duran Lleida, su más directo rival, para la sucesión de Jordi Pujol al frente de la presidencia de la Generalitat.