El fiscal pide 45 años de prisión para un acusado de asesinar a dos alemanes
El súbdito ruso acusado de matar a dos alemanes en un chalé ubicado en una urbanización de Chiva, Vasile P., defendió ayer ante el jurado popular que le juzgará su inocencia: estuvo cenando el 8 de enero de 1997 en casa de los dos asesinados, Hans R. (63 años) y Daniel O. (23), pero ni participó ni tiene información alguna sobre su salvaje asesinato. El fiscal no opina lo mismo. El representante de la acusación pública pide 45 años de prisión para el procesado, quien, en compañía de un compatriota en paradero desconocido, sería responsable de dos asesinatos y un robo con violencia. Los alemanes fueron golpeados repetidamente, torturados con un cuchillo previamente calentado y atacados con varias armas. Sus agresores, siempre según el fiscal, tenían la intención de apoderarse de todos los objetos de valor que pudiera haber en la vivienda. Y de hecho, robaron algunos.
Vasili P. dijo no tener relación con los crímenes. Si sus huellas aparecen en varias colillas o el cable de una radio utilizado para estrangular a la mayor de sus víctimas, explica, fue porque estuvo cenando con la pareja de alemanes. Abandonó la vivienda cuando Hans R. "puso su mano" en su pierna. "Yo se la quité porque no me gustaba su compañía", dijo.
El abogado defensor incidió en esos argumentos para luego justificar la presencia de su cliente en Chiva: los fallecidos buscaban en la casa de la Caridad de Valencia a extranjeros con los que, a cambio de dinero, mantenían relaciones sexuales. "Quien hizo esos asesinatos fue un salvaje", dijo el letrado mientras proclamaba la inocencia de Vasili P., de 23 años.
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