Maragall dice que un pacto de CiU con ERC y PP no aporta estabilidad

Pasqual Maragall criticó ayer las negociaciones que la cúpula de Convergència i Unió (CiU) mantiene a dos bandas con el Partido Popular (PP) y Esquerra Republicana (ERC), porque a su juicio "no ayudan a la estabilidad del Gobierno". Maragall vaticinó que la investidura de Jordi Pujol como presidente de la Generalitat se producirá el próximo jueves y no el lunes "y no de la manera que habíamos pensado, con mayoría absoluta, sino por mayoría simple", dijo Maragall. Según el líder socialista, la perspectiva actual es la de que Cataluña va a tener "el Gobierno más débil de los últimos 20 años".Para preparar este debate, Maragall se reunió ayer en el Parlament con el líder de Inciativa-Verds, Rafael Ribó. Al término del encuentro éste explicó que "de momento lo único seguro es que en el debate de investidura habrá 55 votos a favor del cambio, los del PSC más los de IC-V, y 56 en favor de la continuidad, los de CiU". Ribó dio por hecho que la investidura de Pujol está garantizada por el PP, por lo que el papel de ERC en las negociaciones a dos bandas emprendidas por Pujol es, dijo, "el de figurantes" en una escenificación, cuyo principal beneficio es darles "una fenomenal cuota de pantalla".

Maragall, presidió anoche la comisión ejecutiva del PSC en Tarragona y agradeció el esfuerzo realizado durante la campaña electoral. Respecto a las plataformas de Ciutadans pel Canvi, que definió como "el empuje, la entrada de aire fresco que necesitábamos como partido", Maragall recordó que se trata de un movimiento no ya joven, sino "infantil", con un año de formación y de cuyo futuro "se tienen que ocupar ellos mismos".

El ex alcalde de Barcelona considera que dichas plataformas deben protagonizar una "confluencia" hacia el partido, aunque se mostró contrario a su constitución "como un partido más".

Consejo nacional del PSC

El consejo nacional del PSC celebra hoy su primera reunión tras las elecciones, con la valoración de los resultados conseguidos como principal punto del orden del día. La dirección del PSC considera que haber obtenido más votos que CiU es ya un éxito, aunque no se lograra el objetivo de obtener más escaños, porque ha dejado a Pujol tan debilitado que en estos momentos ya nadie duda de que el cambio ha comenzado en Cataluña. Este planteamiento sólo ha sido rebatido por los integrantes de Ágora Socialista, una pequeña corriente formada por algunos militantes procedentes de la extinta federación catalana del PSOE.

Esta corriente ha criticado que la campaña electoral estuviera dirigida por el equipo de Maragall, al que acusan de haber obviado la figura del partido socialista para plantear la batalla electoral en términos de plebiscito y adhesión a la persona de Maragall. También critican que éste se inclinara hacia posiciones liberales y buscara el apoyo de empresarios.