El ente público dedicado a la alta velocidad carece de presupuestos en el 2000 para el AVE a Valencia

Los presupuestos generales del Estado no han destinado ninguna partida para que el ente público Gestor de Infraestructuras Ferroviarias (GIF), la oficina que construye todos los proyectos de alta velocidad, acometa el año próximo la línea Madrid-Valencia. Para que las máquinas inicien las obras faltan muchos trámites. Y el GIF, que manejará 245.000 millones de pesetas en el 2000, ve muy difícil que se acometan en un año. Esta evidencia contradice las continuas manifestaciones del presidente del Consell, Eduardo Zaplana, que asegura que las obras arrancarán en el 2000.

De los 245.000 millones del GIF, la mayor parte se invertirán en la línea de alta velocidad (LAV) Madrid-Zaragoza-Barcelona-Frontera Francesa, que estará operativa hasta Lleida en el 2002 y hasta Figueras en el 2004. En los tramos de Cataluña se invertirán 76.199 millones, en los de Aragón, 79.223, en los de Castilla-La Mancha (Guadalajara) otros 25.399 y, por último, en los de Madrid, 26.364 millones.Éste es el trazado más avanzado. Las otras dos líneas acometidas por el GIF, el ramal Córdoba-Málaga y el Madrid-Valladolid, van más lentos (aún en fase de proyecto). Por regiones, para Andalucía se han destinado 3.000 millones y para Castilla y León otros 25.478. Por último, otros 9.733 millones son gastos no asignables a ninguna región.

Y si el GIF no dedicará dinero a la Comunidad Valenciana, entre las partidas que el proyecto de ley de los Presupuestos Generales del Estado para el 2000 destina a Fomento tampoco figura ningún dinero para el AVE. Es más, si en la ley de Presupuestos de 1999 se preveía que en el 2000 se dedicase una partida de 274 millones a los estudios de una línea de alta velocidad a Valencia, esa partida ha desaparecido ahora.

El PP ha llegado a decir que si Fomento no tenía ese dinero era porque es el GIF el que debe construirlo. Pero además de que tampoco hay dinero para este ente, que a principios de septiembre sólo había oído rumores sobre el ansiado corredor, el GIF únicamente se encargará de eso, de construirlo, y no de hacer todos los estudios previos.

"Ramal de Levante"

Días después de conocerse que el ente público creado por El Gobierno central en diciembre de 1996 para hacer líneas de alta velocidad no tuviera noticias directas del AVE Madrid-Valencia (véase EL PAÍS del pasado 9 de septiembre), el Consejo de Ministros decidió el pasado 17 de septiembre encargar al GIF la construcción y la administración de la futuro línea, que ya tiene nombre: Nuevo acceso ferroviario de alta velocidad Ramal de Levante: Madrid-Castilla-La Mancha-Comunidad Valenciana-Región de Murcia. Pero esta decisión del Gobierno central de José María Aznar, del PP, todavía no quiere decir que el GIF dedique el más mínimo esfuerzo al encargo.

Para que se empiece a construir un tren de alta velocidad, según explican en el GIF, lo primero es que haya un proyecto de trazado. Y el Ministerio de Fomento todavía no ha elegido uno. Así, a pesar de que la Generalitat anunció a mediados de verano que en la primera semana de septiembre los tres presidentes regionales más afectados -Alberto Ruiz-Gallardón, por Madrid, José Bono, por Castilla-La Mancha, y Zaplana-, consensuarían un recorrido del trazado, dos meses después no se sabe nada.

Semana tras semana se anuncia que la elección entre las tres opciones estudiadas (norte y centro, ambas directas, y sur, pasando por Albacete) o otras propuestas de última hora (como el trazado integral, por Cuenca y Albacete, lanzado por Bono) es inminente. Pero la selección del trazado favorito del Gobierno sólo daría a paso al siguiente trámite: sacar a información oficial (para que las distintas administraciones hagan sus alegaciones) y a información pública (cualquier organismo o particular podrá hacerlas) todos los trazados.

Tras el estudio de todas las alegaciones, trámite que se puede prorrogar muchos meses, Fomento, todavía responsable del proyecto, debería redactar un estudio informativo del trazado para someterlo a la declaración de impacto ambiental. Así, es luego el Ministerio del Medio Ambiente el que debe estudiar sus previsibles afecciones a la naturaleza.

Una vez oído este departamento, el proyecto definitivo del trazado (que incluirá las recomendaciones del estudio de impacto ambiental) tendrá que servir de base a la elaboración de los proyectos constructivos para cada tramo y subtramo. Aquí es donde ya entra el ente Gestor de Infraestructuras Ferroviarias, que es el que licita la elaboración de esos proyectos constructivos. Una vez estudiadas las ofertas se adjudica la elaboración de esos planos, pero sólo en este trámite técnico los ingenieros tardan entre tres y cuatro meses. Y una vez realizados estos planos de detalle habrá que licitar las obras.

Endeudamiento

"En plazos legales, empezar antes del 2001 sería correr mucho", explican en el GIF. Ése es el motivo por el que no hay presupuestos para construirlo. Sin embargo, recuerdan que las líneas de alta velocidad se financian de tres maneras. Con los presupuestos del Estado, con las aportaciones de la Unión Europea (sobre todo fondos de cohesión) y por último endeudándose. Así, aunque todavía no lo ha hecho, el organismo se creo para poder agilizar las obras endeudándose. Por tanto, cabría la posibilidad de que si las presiones de las regiones forzasen a Fomento a correr mucho se empezaran las obras con esta fórmula.