La juez fija para el 17 de enero el juicio por el incendio que destruyó el Liceo

La titular del Juzgado de lo Penal número 23 de Barcelona, María Mercedes Otero, ha fijado para el próximo 17 de enero el inicio del juicio por el incendio que destruyó el Gran Teatro del Liceo el 31 de enero de 1994. La vista, que se puede prolongar durante varios días, había sido señalada para el 19 de julio, pero fue suspendida ante la imposibilidad de citar a uno de los acusados.En el banquillo se sentarán el ex director técnico del Liceo Josep Maria Folch y su asistente, Konstance Múller, a quienes el fiscal acusa de un delito de imprudencia temeraria con resultado de incendio y reclama sendas penas de dos meses de arresto. Del primero, el juez instructor aseguró que "le correspondía un deber de cuidado sobre todos los elementos del escenario" y porque fue suya la decisión de retirar temporalmente y por razones estéticas el telón fijo cortafuego entre mayo y septiembre de 1993, durante la representación de la ópera Orfeo. En cuanto a Müller, el instructor consideró que, con su pasividad, propició el incendio, pues "no adoptó las disposiciones que hubieran sido pertinentes para evitar los riesgos que comportaban los trabajos de soldadura" que se estaban realizando en el escenario.

Las acusaciones particulares han logrado que otras cuatro personas más también sean juzgadas. Se trata de José Borrás y Jordi Castro, ayudantes de las dos personas ya citadas. De ambos se afirma que no prohibieron a los soldadores Carmelo Poza y Juan Bernal realizar su trabajo; en cuanto a los operarios, se les acusa de no adoptar las medidas de seguridad necesarias. El fiscal considera que la compañía aseguradora debe pagar 2.700 millones de pesetas en concepto de responsabilidad civil.