La subida de sueldos divide a los concejales del PP de Alicante

La decisión del alcalde de Alicante, Luis Díaz Alperi, del PP, de suspender, por dos veces, el debate plenario acerca de la subida salarial para los políticos, no ha contentado a los concejales de su grupo. En la reunión urgente que se celebró antes de la segunda suspensión, impuesta personalmente por el presidente Zaplana, algunos ediles populares pidieron al alcalde que hiciera valer la autonomía municipal. La mayoría quiere subida de sueldos.

La polémica sobre el incremento de emolumentos de los concejales de Alicante no se ha zanjado con la decisión del alcalde de suspender el debate y dejar sobre la mesa la propuesta, que suscribía el portavoz popular, Pedro Romero. La mayoría de los concejales del PP presionan al alcalde para que haga valer la autonomía municipal frente a la influencia de los dirigentes regionales del partido, y someta a votación una moción que les permitirá aumentar sus ingresos entre un 30 y un 35%.El equipo de gobierno ha retirado en dos ocasiones, siempre a última hora y por indicación directa del presidente Zaplana, el proyecto de incremento salarial para los políticos de la Corporación alicantina. En la última ocasión, Alperi tuvo que llamar a consulta a sus ediles para pedirles, casi en tono de ruego, otra demora, después de recibir una llamada telefónica desde el Palau en ese sentido.

La reunión urgente levantó ampollas en el grupo municipal. El pleno que debía acoger la moción estaba convocado para las 10 de la mañana, pero la discusión que mantenían los concejales del PP en el despacho del alcalde demoró el inicio de la sesión hasta pasadas las 11. Al final se impuso la disciplina de partido, aunque hubo quien propuso una votación a mano alzada en pro de esa autonomía frente a imposiciones de órganos superiores.

La existencia en el seno del grupo de dos ediles independientes complicó el debate interno, en el que no se escatimaron críticas a la injerencia del presidente. El empresario Juan Zaragoza y el bancario Andrés Llorens apuestan por el aumento salarial, y repiten como argumento casi único que pierden dinero con el desempeño del cargo. Opinan igual el portavoz del grupo y autor de la propuesta, Pedro Romero, y al menos otros nueve concejales, incluido el alcalde.

Únicamente tres de los munícipes populares participan de la idea de que elevar los ingresos en estos momentos sería "contraproducente", dada la proximidad de un debate global sobre esta cuestión en el seno de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP), del que deberá emanar una recomendación acerca de las retribuciones de los cargos públicos valencianos.

Se trata de Julio de España, Juan Seva y María Teresa Revenga, esta última más por fidelidad a Zaplana que por convencimiento personal, según explicó en esa reunión, cuyo contenido ha trascendido. Curiosamente, los dos primeros no reciben sueldo municipal, dada su pertenencia a organismos públicos supramunicipales de los que cobran. De España preside la Diputación, y Seva forma parte del Senado, matices que destacan el resto de concejales, cuya economía familiar depende de ese ingreso.

"Vamos a hacer el ridículo si lo retiramos otra vez", se oyó en la reunión privada tras la que el PP decidió, efectivamente, hacerlo. "El presidente me lo ha pedido como favor personal", reiteró Díaz Alperi para convencer a su equipo. La propuesta de subida salarial ha quedado bloqueada sine die, y algunos ediles populares creen que este mandato se quedarán con los sueldos congelados, como exigen los funcionarios.