¡'Míster', quiero ganarle al Barça!
Geremi, el hombre más fiel de Toshack, desobedeció sus órdenes en el Camp Nou
"Míster, que quiero ganarle al Barça. ¡Quiero ganarle al Barça...!". Alegando -con tono de protesta- su intención de llevarse los tres puntos, Geremi Fotso Ndjitap desobedeció las órdenes de Toshack en el Camp Nou. Con actitud indiferente, el hombre más aplicado del técnico galés pasó de él por primera vez. Con un 2-2 en el marcador, en el último tramo del Barça-Madrid, Geremi subía galopando hacia el área rival, obcecado, sin atender al técnico, que le reclamaba lo contrario a gritos: "¡Te he dicho que no subas!".Hasta ese momento, la hoja de servicios de Geremi era impecable. Toshack lo alineó a la derecha de Redondo y antes del partido lo apartó y le dijo: "Quiero que marques a Zenden, Sergi y Rivaldo". Y ni Zenden hizo bien su papel de extremo, ni Sergi avanzó por la banda, ni Rivaldo se movió con soltura en la media punta. Geremi los acosó.
Toshack contempló satisfecho el desempeño de un jugador al que considera un descubrimiento suyo: "Los cogió a los tres. Zenden no hizo nada. Sergi se marchó una vez por la banda. Sólo una vez. Y le hice una señal, como diciéndole: te he visto, se te ha escapado uno".
Nacido en Bafoussam (Camerún), Geremi fue descubierto por Toshack en la Liga turca, donde lo eligieron mejor jugador extranjero de la temporada 98-99, militando en el Genlebirligi de Ankara. Su fichaje por el Madrid -700 millones de pesetas- despertó sospechas: Geremi manejaba mal el balón. Pero no era la técnica el valor que buscaba Toshack. Al menos, no la técnica en el sentido ortodoxo: "Tiene más técnica de la que aparenta" -objeta el técnico- "si no, no se explica que pierda tan pocos balones. Lo que pasa es que es duro, cuando chocas con él te pega con el hombro y no veas cómo duele. Por eso es tan difícil robarle la pelota".
Toshack no busca florituras en Geremi. Quiere su fidelidad. Su capacidad física entregada a las órdenes tácticas. Por eso se sorprendió con la desobediencia. Porque hizo entrar a Seedorf y Guti para hacer de enganches y envió a Geremi atrás. El entrenador advirtió a su segundo, José Manuel Corral, que mandara a Geremi a defender: "Que se quede quieto, atrás, con Michel. Que para atacar están los otros".
Pero el camerunés siguió atacando. Haciendo ruido en las inmediaciones del área del Barça. Hasta que sobresaltado, Toshack lo llamó al orden. "Te he dicho que no subas", le dijo. Y la respuesta que obtuvo justificó de sobra el desacato.
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