Arenas presume de la unidad del PP en medio de nuevos conflictos internos
El secretario general del PP, Javier Arenas, presumió ayer de la cohesión interna de su partido como uno de sus mejores avales ante las próximas elecciones y para contraponer esa unidad a las crisis, que situó únicamente en el PSOE. Arenas hizo ese balance triunfalista justo el día en el que se conocieron nuevos conflictos o disputas ante los congresos regionales de los populares en Extremadura, Canarias, el País Vasco y Galicia. El alcalde de Mérida mantiene su intención de competir en Extremadura con Juan Ignacio Barrero.
Javier Arenas tendrá que emplearse a fondo estos días para resolver la madeja de problemas que le empiezan a surgir en distintos lugares como preámbulo de los 18 congresos regionales que el Partido Popular (PP) tiene convocados a partir de este fin de semana. Su agenda de trabajo de ayer fue una muestra clara de esa dedicación.El alcalde de Mérida, Pedro Acedo, se presentó ayer en la sede nacional del partido para intercambiar una serie de reflexiones con el secretario de Organización, Juan Carlos Vera. Acedo había manifestado en las últimas semanas su intención de concurrir para el cargo de dirigente regional del PP en competencia con Juan Ignacio Barrero, el actual y ex presidente del Senado. Acedo llegó a denunciar el viernes pasado que el aparato del partido, controlado por Barrero, está empleando "métodos totalitarios, antidemocráticos e incluso delictivos" para boicotear su lista alternativa. Acedo aludía así a una reciente actuación de Barrero respecto a algunos compromisarios que habían avalado su candidatura y que cambiaron de opinión tras una conversación con el aún presidente regional de los populares. Tales compromisarios firmaron luego también en favor de Barrero y con esa duplicidad anularon la validez de su voto. Este comportamiento no es ilegal y está previsto en los estatutos. Sin embargo, es cuestionado políticamente. Así, Acedo lo denunció ante los órganos internos competentes.
Desde la dirección nacional del PP se le hizo saber ayer a Acedo que no tiene mucho sentido calificar esa actuación de Barrero como autoritaria y antidemocrática "si no perseguía perjudicar la imagen del partido y sembrar sombras de duda injustificables". A Acedo no se le pidió abiertamente que retirase su candidatura. Se le instó, incluso, a competir por el puesto de presidente regional, pero se le advirtió, eso sí, de que sufriría una derrota clamorosa que sólo podría perjudicar su imagen porque apenas cuenta con 70 avales -que no votos- de 400 compromisarios.
Desde la dirección del PP también se habló con Barrero para que sus partidarios dejen de boicotear y buscar reparos a los posibles avales de Acedo para presentarse como candidato.
Acedo se quedó, en principio, algo convencido ante estas explicaciones, que le fueron ofrecidas en nombre de Arenas y en presencia de Carlos Floriano, el actual secretario general del PP extremeño, hombre de confianza de Barrero. Hasta llegó a decir que retiraba su candidatura, lo que permitió a Arenas comparecer ante la prensa por la mañana con esa noticia de última hora. Pero, por la tarde, tras conversar con algunos de sus partidarios, Acedo volvió a llamar al PP para aclarar que no renuncia a nada y que se toma unos días para determinar su futuro.
En el PP se situaban ayer las dudas de Acedo en su interés por medir sus fuerzas con vistas al congreso provincial del partido, en Badajoz. Y también se insinuaba que podría estar movido por el sector crítico con Barrero, encabezado en su día por Luis Ramallo, ahora vicepresidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
A pesar de este conflicto y de otros más larvados, Arenas se permitió ayer augurar que el PP se presentará en casi todos sus congresos regionales con tan sólo una lista en cuestión. Así, aventuró su intuición de que habrá integración en Baleares. También reveló que ha recibido al presidente en funciones del PP canario, José Manuel Soria, alcalde de Las Palmas, y que incluso allí hay posibilidades de aglutinar las alternativas en disputa.
Soria acudió a Madrid para relatar que los críticos del PP canario han fracasado en su intención de promover para el puesto al recién dimitido presidente, José Miguel Bravo de Laguna, porque éste rechazó el envite. También indicó que la presidenta del partido en Gran Canaria, María Eugenia Márquez, ha desistido de su interés por el puesto tras comprobar que no dispone de suficiente respaldos en las elecciones de compromisarios. Sin embargo, ayer mismo, el diputado nacional Antonio Luis Medina se ofreció como nueva alternativa a Soria si cuenta con la ayuda de los críticos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.