Igor, un proyecto de corredor completo
Todo el mundo echó mano a sus notas sobre Igor González de Galdeano, natural de Vitoria, que cumplirá 26 años en noviembre. Porque nadie le había anunciado en esta Vuelta. Para empezar, ni siquiera el propio Javier Mínguez, su director, un hombre obligado a la prudencia. "No renuncio a nada, pero hay que dejarle tranquilo, no sé lo que será de él las próximas etapas". Para terminar, él mismo. Igor estaba tan sorprendido de cuanto sucedía a su alrededor que ni siquiera reparó en aprovechar al máximo su esfuerzo para arañar segundos de ventaja sobre Ullrich. Ígor llegó a la meta sonriendo, dando besos a su novia a través de las cámaras de televisión, saludando a la concurrencia a diestro y siniestro. "Quise disfrutar el momento. Sobre todo eso. Estoy sorprendido de mí mismo. Qué más puedo pedir". Tanto Ígor como Javier Mínguez evitaron hablar del porvenir inmediato. Lo suyo será vivir al día: Igor está a 38 segundos del liderato. De Igor, el joven de los hermanos González de Galdeano (otra saga de ciclistas que añadir a los Unai Osa, de Banesto), se tenía como última referencia una victoria de etapa en la Tirreno Adriático, allá por marzo. No fue una victoria cualquiera, ya que se había metido en una escapada donde estaban hombres tan expertos como Jalabert o el propio Bartoli, ganadores natos. Desde ese momento hasta hoy mismo, poca cosa más, salvo su victoria en la prólogo de la Vuelta.Condiciones
De sus condiciones como rodador ya se tenían noticias. Mide 1,85 de estatura y tiene condiciones para la contrarreloj. Brilló como corredor aficionado, tuvo un leve tránsito como profesional en el equipo Euskadi y pasó al equipo Vitalicio. Era un corredor joven todavía, sin clasificar. La Vuelta a España ha puesto a colación que, entre sus virtudes, también está la de aguantar la presión de los escaladores en la montaña. Ello le convierte en un proyecto de corredor completo, de los que no hay demasiados en el actual pelotón. Durante el Tour dedicó bastante tiempo a la preparación física, en detrimento de la mera actividad en bicicleta. Igor optó por entrenamientos de musculación y en tratar de llegar a la Vuelta en condiciones óptimas. Igor hizo todo ello con especial interés: actualmente estudia para ser profesor de Educación Física.
Las próximas etapas pondrán a prueba sus condiciones para llevar la jefatura del equipo. De cumplir con el cometido, Igor estaría en disposición de convertirse en la perla del equipo Vitalicio, sometido últimamente a las tensiones propias del mercado. Vitalicio sólo puede garantizar a sus corredores un año más de contrato, lo cual le convierte en presa fácil para otros conjuntos. Vitalicio vivía estos días bajo la amenaza de una fuga de corredores. Tal ha sido el caso de Casero, que acaba de firmar por dos años con Festina. Tal iba a ser el caso de otros. En esas circunstancias aparece Ígor en escena. ¿Será la salvación para Mínguez y los suyos?
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.