La desviación de la inflación costará más de 100.000 millones

La revisión al alza de la previsión de inflación para 1999 obligará a revisar la subida salarial de cuatro millones de trabajadores, de ocho millones de pensionistas y, si el Gobierno lo estima oportuno, de dos millones de funcionarios. El coste total, dejando fuera a los funcionarios, alcanza los 100.000 millones de pesetas.De los 3.351 convenios colectivos firmados hasta la fecha, 1.311 recogen una cláusula de revisión, lo que supondría un coste suplementario a las empresas de 58.000 millones de pesetas, según los sindicatos. En cuanto a las rentas de los pensionistas, que se revisan con la inflación interanual de noviembre, la revisión del IPC costaría unos 42.000 millones, que deben obtenerse de los Presupuestos.

A esto habría que sumar los más de dos millones de funcionarios. Los empleados públicos han visto congelados este año sus salarios en términos reales (es decir, una subida del 1,8%), "lo que se convertiría en una pérdida de poder de compra si el Gobierno no compensa la desviación del IPC previsto".

El Gobierno sube anualmente los salarios de los funcionarios de acuerdo a la inflación prevista vía Presupuestos Generales, al igual que a los pensionistas. Según los sindicatos, lo lógico es que también se les revise, pero fuentes gubernamentales se han mostrado reacias a hacerlo. De decidir un aumento adicional, el coste se elevaría en otros 16.000 millones de pesetas, según cálculos sindicales.