Vallecas pone reparos a las salas para que los drogadictos se inyecten heroína

La asociación de vecinos de Vallecas ha puesto serios reparos a la apertura de salas para que los toxicómanos se inyecten heroína en los poblados marginales de La Rosilla y Las Barranquillas. La decisión regional es un "parche" que oculta las dimensiones reales del problema, según los vecinos. "Lo que queremos es que desmantelen La Rosilla. Cada distrito debería tener una sala para atender a sus toxicómanos. Nosotros estamos saturados de drogodependientes", afirmó un portavoz vecinal.

El proyecto de las narcosalas es una experiencia nueva en España, que ya se ha implantado en Holanda, Austria y Suiza. Se trata de recintos con control asistencial y buenas condiciones higiénicas a los cuales pueden acudir a pincharse los heroinómanos que ahora se inyectan en el interior de las alcantarillas o en tiendas de campaña.El director de la Agencia Antidroga de la Comunidad de Madrid, José Cabrera, anunció el pasado martes que serían La Rosilla y Las Barranquillas los primeros poblados que contarían con las salas de venopunción dentro de 45 días. Ayer, sin embargo, Cabrera aseguró que la experiencia se llevará a cabo por primera vez en Las Barranquillas y no en La Rosilla, como había manifestado en principio.

Para el presidente de la Asociación de Vecinos de Vallecas, Ignacio García Mayoral, la decisión de la Comunidad no es más que un "parche", según declaró a Europa Press.

Para Pedro Ortiz, el vicepresidente de la asociación vecinal, "las narcosalas atraerán no sólo a los toxicómanos de Madrid, sino de toda España". "Nosotros no somos la madre Teresa de Calcuta para acoger a todo el mundo. Ya estamos saturados de drogodependientes", señaló Ortiz. El vicepresidente de la asociación aseguró, sin embargo, que no se trata de "un no rotundo", sino de una postura sujeta a negociaciones con la Comunidad.

El concejal presidente de la Junta de Villa de Vallecas, Ángel Garrido (PP), anunció que se reunirá hoy con el director de la Agencia Antidroga para conocer en detalle el proyecto. "Si los estudios determinan que se deben abrir éste tipo de salas, nosotros no tendremos ningún inconveniente, pero tiene que existir previamente un consenso".

Un menor, herido grave

Por otra parte, un niño de 11 años resultó ayer tarde herido grave tras ser arrollado por un coche robado conducido por un toxicómano que huía de la policía en el poblado de Las Barranquillas. El pequeño fue ingresado en el hospital Gregorio Marañón con múltiples contusiones y las piernas rotas. El accidente sobrevino después de que un coche patrulla se aproximará a un automóvil para identificar a su ocupante. En la escapada, el toxicómano arrolló a un niño gitano que jugaba en la salida del poblado. El conductor, José G. R., de 26 años y con nueve antecedentes por robos, abandonó entonces el coche y huyó a pie. Fue detenido por los agentes a medio kilómetro de distancia.