Empieza el recuento con escasa protección

La totalidad de los votos emitidos el pasdado lunes en el referéndum sobre el futuro de Timor Oriental ya se encuentran en el centro cultural Negeri Propinsi de Dili, donde ayer se inició el recuento. La misión de Naciones Unidas estima que el proceso durará cuatro días y el resultado, probablemente, no será hecho público hasta el próximo lunes. Los responsables de la misión aseguran que el centro cultural, situado a unos 500 metros de una de las sedes de la milicia prointegracionista Aitarak, está suficientemente protegido por las fuerzas de seguridad indonesias. Sin embargo, ayer mismo, el centro se encontraba sin ninguna protección policial y sólo controlaban su entrada dos funcionarios sin armas. Yakarta tiene desplegados 15.000 hombres entre policías y soldados en el territorio, pero su ausencia de las calles es llamativa. Se les ve en los edificios que ocupan por toda la ciudad con aire relajado, jugando al fútbol o realizando marchas al trote a primeras horas de la mañana. Hoy llegarán 350 más. Indonesia ha sido advertida repetidamente por la comunidad internacional de que debe controlar la violencia, y ayer mismo, Jaime Gama, ministro de Exteriores de Portugal, a ojos de Naciones Unidas la potencia administradora del territorio, convocó a los embajadores en Lisboa de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad para pedirles que se incremente la presión sobre Yakarta y evitar con ello que todo degenere en un baño de sangre. El ministro de Exteriores de Nueva Zelanda llegó ayer a insinuar la conveniencia de una intervención de pacificación de varios países sin el paraguas de Naciones Unidas: Australia, Estados Unidos, Japón y algunos de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático, además de la propia Nueva Zelanda. Australia, cuya costa está a 500 kilómetros de Timor, desautorizó inmediatamente la propuesta y dijo que no intervendrá en su vecino del norte.