Gil reclama para Marbella una desaladora hecha para 11 pueblos

"El que la hizo soy yo". El alcalde de Marbella, Jesús Gil, dio ayer por sentado que tras perder la presidencia de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental, organismo que engloba a 11 municipios actualmente, hará todo lo posible para que la desaladora construida durante su mandato al frente de la entidad pase a manos del Ayuntamiento que preside.El primer edil explicó ayer mediante un comunicado, en el que además anunciaba la salida de Marbella de la institución, que la planta "está construida en suelo municipal" y que en un futuro garantizará "exclusivamente" el suministro de agua de su localidad. Gil ha anunciado ya la convocatoria de un pleno para aprobar el abandono de este órgano. PSOE, PP e IU respondieron que, aunque Gil abandone la Mancomunidad, la desaladora pertenece al organismo.

"Marbella está en condiciones de asumir la financiación a 30 años de la desaladora", manifestó Gil. La construcción de la planta, que contó con el consenso de todos los grupos representados en el organismo, corrió a cargo de Decosol, una unión temporal de empresas entre Edesa y Laín, con un coste de 8.998 millones con cargo a la Mancomunidad. El alcalde mantiene que el 85% de su coste estaba garantizado por fondos de la UE y el resto lo financiaría la Junta de Andalucía. Pero aún no se ha abonado una sola peseta y la oposición no tiene constancia de ningún acuerdo. "Los que han criticado incluso la existencia de la desaladora pueden buscarse ahora sus propios medios y la ciudad de Marbella podrá contar con el agua que le corresponde del embalse de la Concepción y con la aportación del agua de la desaladora", aseguró el alcalde.