CARLOS Y CAMILLA, VACACIONES FAMILIARES

Años de espera y ostracismo han dado por fin su fruto. Camilla Parker-Bowles, compañera sentimental de Carlos de Inglaterra, disfruta desde ayer de las primeras vacaciones junto a su amado y los hijos de éste, los príncipes Guillermo y Enrique. El grupo piensa efectuar un crucero por el mar Egeo, y durante los 10 próximos días navegarán por las costas griegas en el lujoso yate Alexander, del armador John Latsis, con un selecto grupo de amigos. Para evitar tumultos, Camilla abordó la nave dos días antes que el trío regio. Estremecida ante la noticia, la prensa británica ha recordado presurosa que los chicos llevan huérfanos sólo dos años. Y lo que es más, el último veraneo que pasaron con su madre, Diana de Gales, fue también en aguas del Mediterráneo. La opinión de Isabel II les resulta más difícil de aventurar a los comentaristas. Con esta salida, Carlos, su heredero, le demuestra que no piensa abandonar a la que considera la mujer de su vida. Los príncipes tampoco parecen llevarse mal con Camilla si hacemos caso de los diarios británicos, que aseguran que partió del príncipe Guillermo la idea de compartir estas vacaciones familiares, y que incluso propuso que se incorporaran Tom y Laura, los hijos de la amiga del heredero del trono. A la reina de Inglaterra le horroriza pensar en su hijo como un monarca casado con una divorciada. Tampoco quiere enfrentarse a la Iglesia anglicana, de la que es jefa suprema. En consecuencia, Camilla no será bienvenida tampoco este año en la residencia escocesa de Balmoral, adonde acudirán los Windsor para coronar su periodo estival.-