Condenados sólo dos de los cuatro acusados de asaltar la sede de Tráfico en Valencia
La Audiencia de Valencia sólo ha condenado a dos de los cuatro acusados de asaltar, en septiembre de 1996, la jefatura central de Tráfico en Valencia. El tribunal ha considerado probado que un guardia de seguridad que trabajaba en las dependencias de la institución, Eduardo M. O., colaboró decisivamente en el atraco, uno de cuyos cinco responsables fue el único de los procesados debidamente reconocido por un testigo: Rafael Carlos F. O. Por contra, los magistrados de la sección cuarta de la audiencia creen que no ha sido acreditada la participación en la operación de otros dos hombres -ambos de nacionalidad argentina- y recuerdan en su fallo que no hay "ninguna prueba" que relacione a los acusados, o a la banda que asaltó Tráfico, con el atraco a una oficina de Iberdrola, perpetrado minutos después del cometido en la oficina pública. Los hechos juzgados sucedieron el 19 de septiembre de 1996. Ese día, a las 14.05 horas, cinco hombres armados con rifles, pistolas o navajas irrumpieron, por la puerta reservada a los funcionarios, en la sede central de Tráfico en Valencia. En apenas unos minutos se apoderaron de casi diez millones de pesetas al hacerse, sin oposición alguna, y merced a un perfecto conocimiento del terreno, de las sacas que contenían la recaudación del día. Sólo uno de los cinco atracadores, Rafael Carlos F. O., ha sido condenado: A cinco años de prisión. Según el fallo, su participación en los hechos está refrendada por la funcionaria que le reconoció. El otro condenado por el atraco no participó directamente en él, aunque su participación fue clave para el éxito del golpe. Eduardo M. O., vigilante en la entidad, facilitó toda la información necesaria y, lejos de cumplir con su obligación, se ausentó del lugar de los hechos. Ha sido condenado a 10 años de prisión por el atraco, el robo de un automóvil y la falsificación de varios carnés.
